Marco toma las riendas en Bruselas para defender las ventajas de la reforma de la avenida Lidón

CASTELLÓ. La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, toma las riendas de la reforma de la avenida Lidón. Lo hace para justificar este martes el proyecto ante la Comisión de Peticiones, donde se abordará la denuncia interpuesta por Vicky Amores, en nombre de la asociación de vecinos Rafalafena, que reclama la paralización de la actuación. La vista incluye solo cuatro turnos de palabra, ya que además de las citadas (Amores abre y cierra como demandante), también está programada la intervención de Hernández Duque, de la dirección general de Política Regional y Desarrollo Urbano.

Según el orden del día para tratar el caso, habrá comparecencia de los grupos parlamentarios. Al término de las alocuciones, se anunciarán una decisión sobre la petición. Si se considera injustificada la reclamación, en tanto en cuanto queda acreditada la adecuada gestión del Ayuntamiento de Castelló, la causa se archivará. Por el contrario, si se entiende que el asunto merece ser analizado por la Comisión Europea, se acordará elevar el correspondiente informe con vistas a solicitar más información.

En este último escenario, el consistorio correría el peligro no solo de perder los fondos europeos para ejecutar la obra civil, sino incluso se enfrentaría a una posible sanción de la UE. Y eso afectaría a la "reputación de la ciudad", como ha aludido Marco en distintas ocasiones al poner a Castelló como ejemplo de ejecución de actuaciones cofinanciadas con Edusi o Feder. Ante ese riesgo, la propia alcaldesa ha decidido personalmente ejercer la defensa en Bruselas.

Apertura de una investigación

La reclamación presentada por Amores persigue la apertura de una investigación de la Comisión Europea sobre el procedimiento seguido por el Ayuntamiento y su presunto incumplimiento de los requisitos con vistas obtener los fondos. En su escrito al Comité de Peticiones, asegura que la reforma de Lidón resulta "perjudicial" para los vecinos y comerciantes de la zona. Además, a su juicio, el proyecto final no se ajusta con el anteproyecto que permitió conseguir la financiación. Asimismo, subraya que los objetivos de mejora de calidad de vida se quebrantan al producirse "la pérdida de funcionalidad y accesibilidad como consecuencia de la reducción de tráfico rodado".

En la respuesta que consta en la Comisión de Peticiones, a instancias del Gobierno español, la actuación cumple con todos los parámetros de la convocatoria Feder. De hecho, la defensa de Marco irá en esa línea. La alcaldesa socialista explicará que el Ayuntamiento acordó en febrero de 2021 una prórroga de la licitación para impulsar un proceso de participación ciudadana. Debido "al gran impacto que tendrían en el público", según la contestación, se abrió la consulta con la organización de siete debates en grupos y ochos talleres, cuatro en la fase de diagnóstico y otros tantos en el diseño del proyecto.

La primera munícipe señalará que de las 112 propuestas presentadas durante el procedimiento, "se tuvieron en cuenta 85". En este punto, recordará que entre los principales objetivos de la remodelación de la avenida figuran la creación de una plataforma peatonal y un carril bici de 1,5 kilómetros y la restricción del tráfico, eliminando la vía de entrada.

Lectura del informe

La intervención de Hernández Duque amparará la diligencia del Ayuntamiento, advirtiendo que el proyecto contribuirá "a promover la movilidad urbana sostenible". En realidad, se limitará a leer el informe de la comisión, en el que, a modo de conclusión, se insiste en que "se tuvieron en cuenta algunas de las sugerencias" vecinales. "También confirmó [el Ministerio] que se había cuantificado la reducción potencial de las emisiones de CO2".

La reforma de Lidón está envuelta en la polémica desde prácticamente su nacimiento. Recientemente un grupo reducido de residentes intentó frenar la obra civil con un conato de protesta. La ocupación de una parte de la avenida obligó a la adjudicataria de la actuación, la UTE Becsa-Telecso, a solicitar la presencia policial para proseguir con los trabajos.