los populares, entregados ante las jugadas en les corts y el reparto de cargos 

'Mazón es mi pastor, nada me falta': el PPCV celebra una comida de exaltación de su unidad  

28/06/2023 - 

VALÈNCIA. 'Carlos Mazón es mi pastor y nada me falta' podría ser ahora mismo el resumen de la vida interna del PPCV. La victoria electoral de los populares, que ya se habían replegado antes de los comicios en torno a su nuevo líder, ha provocado un sentimiento 'happy flower' dentro del partido que no se percibía desde hace tiempo y que el pasado lunes se evidenció en una comida (muy larga) del grupo parlamentario. Todo parece perfecto y todo parece que vaya a ir bien, a juzgar por los comentarios de aquellos a los que se pregunta. Los sobresaltos llegarán, pero que nadie les robe este momento. 

Mazón salió el lunes exitoso de una jornada que podría no haber acabado como acabó. Se trataba de la constitución de Les Corts. En virtud del pacto alcanzado entre el PPCV y Vox, estos últimos pasaban a ostentar la presidencia del Parlamento autonómico. La elegida fue Llanos Massó, una diputada del sector duro de Vox que ha ejercido de ariete contra la política educativa del Botànic de lo que considera "adoctrinamiento en las aulas". Vinculada a la plataforma Hazte Oír –de la que fue delegada aunque ya no forma parte–, se posiciona contra el aborto y se define como adversaria de lo que denomina "feminismo radical". 

En el PPCV existía temor. Y seguirá existiendo con sus nuevos socios. Son conscientes de que sus salidas de tono les pueden perjudicar. Ocurrió con el diputado José María Llanos, quien afirmó que "la violencia de género no existe y la violencia machista no existe" justo tras la firma del pacto de Gobierno en el que eliminaban estos términos para prometer que lucharían contra la "violencia intrafamiliar". Así que los populares viven en una tensión permanente que tienen que asumir y que, seguramente, les dure toda la legislatura. De hecho, uno de sus mayores retos es lograr una unidad de discurso dentro del Consell

Pero el lunes no hubo excesivos problemas en este sentido. Massó tomó posesión de la presidencia de Les Corts y se puso inmediatamente el traje institucional. Especialmente en el discurso por el que diputados del PPCV le trasladaron su felicitación. Respiraron tranquilos. Pocas horas antes, el líder de Vox, Santiago Abascal, se había trasladado a València para reivindicar como logro que su partido estuviera al frente del Parlamento autonómico y que hubiera sellado un acuerdo con los populares. Sin embargo, más allá de su presencia, no se convirtió en protagonista de la jornada. 

    

Realmente, lo fue Mazón con una jugada que dejó al PSPV noqueado. En el reparto de los cincos miembros de la Mesa de Les Corts y con la presidencia para Vox, el PPCV pasaba a ostentar dos. Los otros dos restantes eran reclamados por los socialistas, que consideraban que eran suyos por la representación obtenida y se negaron a cederle uno a Compromís, hasta ahora socios en la Generalitat.

No se esperaban que bajo mano, en realidad, estuvieran actuando los populares junto a Compromís. Los primeros acabaron cediendo los votos exactamente necesarios (18) para que saliera adelante su candidata a la secretaría segunda de la Mesa: la vicepresidenta en funciones de la Diputación de Valencia, Maria Josep Amigó. Los socialistas habían propuesto a la consellera Gabriela Bravo –quien ostentará la vicepresidencia segunda– y a Josefina Bueno. Esta última quedó apeada con un voto de diferencia respecto a la candidata de Compromís. Hasta en el propio PPCV supieron de la jugada justo antes del pleno.

Todavía son difíciles de describir las caras en la bancada del PSPV tras lo sucedido, con expresiones de asombro y de desconcierto. El hecho de que Bravo, que además es independiente y pareja sentimental del presidente de la Generalitat en funciones, Ximo Puig, ocupe el puesto más alto del partido en una institución ha generado un profundo malestar interno. Los socialistas se encuentran en plena implosión. Una situación que recuerda al PPCV de 2015, cuando perdió casi todo el poder institucional en la Comunitat. Y ahora las tornas han cambiado.

   

Así que con todo este cúmulo de circunstancias, los populares se entregaron a la celebración después del pleno de constitución de Les Corts. Según fuentes del partido, acudieron al restaurante El Coso, ubicado en el Paseo Neptuno de València –junto a la playa– y la sobremesa se alargó hasta bastante entrada la tarde. 

Básicamente, se trató de un acto de exaltación del partido y del líder. El hecho de que esté designando para cargos de importancia a personas que no son consideradas de su círculo más cercano o de su sector dentro del PPCV ha sorprendido y agradado. Piensan que da una imagen de seriedad que el criterio no sea el de la amistad personal. Como ejemplo, Alfredo Castelló y Víctor Soler –vicepresidente y secretario primero de Les Corts respectivamente–. Así creen que seguirá ocurriendo tanto en el Consell como en el Parlamento autonómico Con Mazón, nada me falta. Y a la unidad ayuda el poder.

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