CASTELLÓ. Haris Medunjanin (Sarajevo, Bosnia, 1985) cuelga las botas. El centrocampista albinegro anunció este viernes en la sala de prensa, en presencia de sus compañeros, que el partido de este domingo ante el RC Deportivo de la Coruña en el Estadio Castalia será el último de su longeva carrera deportiva: "He estado pensando mucho en la segunda vuelta porque me ha costado, tenía molestias, pero mi objetivo era subir a Segunda cuando vine y para mí eso sirve para tomar está decisión, porque físicamente tengo problemas".
Internacional en sesenta ocasiones con Bosnia, alcanzó su mejor momento cuando disputó el Mundial de Brasil en 2014. Allí se enfrentó a los Messi, Agüero y compañía en una selección bosnia en la que compartió minutos con grandes jugadores como Djeko, Pjanic o Kolasinac, reciente campeón de la Europa League con el Atalanta. Ésta ha sido su tercera aventura en el fútbol español. Anteriormente militó en el Deportivo de la Coruña y el Valladolid: "Terminar mi carrera contra mi ex equipo y ganando un título sería muy bonito".
Es tan solo una reseña de la talla como futbolista de Haris, que llegó el verano pasado a Castellón de la mano de Dick Schreuder, con quien ascendió a la Eredivisie con el PEC Zwolle el año anterior. Ambos se conocieron en el fútbol americano.
Medunjanin respondió muy rápido a las dudas iniciales en el entorno albinegro, debido a su edad. Hoy, la afición albinegra lamenta su adiós deportivo: "Recibí el cariño desde la grada porque sabia que la gente iba a pensar a qué viene este viejo. Yo quería demostrar que podía jugar a alto nivel todavía y cumplimos este sueño de volver a Segunda juntos. Debo dar las gracias también a Bob [Voulgaris] y a Dick, que han hecho mucho para que viniera aquí".
Su futuro seguirá siendo albinegro, como uno más en el staff que dirige Dick Schreuder: "No lo sé, pero el club quería hablar conmigo y a mí me gustaría estar en el campo ayudando. Veremos después del verano, pero me gustaría seguir y ayudar al equipo porque aquí me siento como en casa".
El Niño, ha quedado encantado con la afición de Castalia pero tiene claro que su momento ha llegado: "La temporada próxima será mucho más complicado porque el nivel va a ser más alto y no veo que pueda estar. Ya he tenido muchos partidos en mi carrera y este era el momento de dejarlo. Me sorprendió cuanta afición en esta categoría. En Holanda eso no ocurre. Aquí se vive mucho el fútbol. Yo tenía grandes recuerdos de mis etapas anteriores en España. En Valladolid y Coruña. Terminar mi carrera contra mi ex equipo y ganando un título sería muy bonito".
Este domingo jugará por última vez como profesional. Un genio que pone el punto y final a una etapa. Con Castalia en el bolsillo y, esperemos, con la Copa de Campeones de 1ª RFEF como segundo éxito en un año intenso.