'Nadie al volante': así es el sistema de Ford que conduce de forma autónoma por autopistas

VALÈNCIA. Conducir sin manos en el volante ya es posible en España. La multinacional Ford avanza tecnológicamente en el diseño del coche del futuro y lanza un nuevo sistema de conducción asistida, bautizado como BlueCruise, que permite circular por autopistas y autovías de forma autónoma, pero con la vista en la carretera. Una posibilidad que hace años sonaba a ciencia ficción, pero que ya es posible en el territorio nacional. 

De esta forma, la multinacional se ha convertido en el primer fabricante de automóviles en recibir la aprobación por parte del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, con la colaboración de la Dirección General de Tráfico (DGT), para introducir esta tecnología. Una solución que se enmarca en la estrategia de la mayoría de compañías de avanzar hacia vehículos inteligentes, eléctricos y totalmente conectados. 

Lo cierto es que este sistema se introdujo a principios de este año en Gran Bretaña y Alemania, por lo que España es el tercer mercado europeo en tenerlo disponible. Además, ya funciona en EEUU y Canadá, donde también está homologado, y, por tanto, más de 225.000 vehículos de Ford y Lincoln en ambos países cuentan ya con BlueCruise, que ha permitido a los clientes recorrer sin manos más de 160 millones de kilómetros. No obstante, ahora llega a España y será a partir del próximo 12 de octubre cuando los propietarios de un Ford Mustang Mach-E puedan activar esta tecnología. Por el momento, solo estará disponible en este modelo, aunque lo más probable es que en los siguientes eléctricos de la compañía se introduzca.

Y es que, cabe recordar, que Ford está acometiendo una profunda transformación de su flota para cumplir con los objetivos de descarbonización. De esta forma, su hoja de ruta en Europa pasa por una gama de turismos para pasajeros totalmente eléctrica para 2030 y lograr una huella de carbono neutra en 2035. Por tanto, el modelo Mustang Mach-E, 100% eléctrico y uno de los más modernos de su gama, ha sido el elegido para instalar esta tecnología. 

De hecho, la segunda versión de este vehículo es uno de los candidatos para ser fabricado en Almussafes tras conseguir la electrificación. No obstante, todavía no se ha concretado la inversión ni el calendario de producción. De ser así, la planta valenciana exportaría coches con este sistema. "Instalar un sistema de estas características implica que se haga desde el principio de la producción de un vehículo porque se necesita una diseño previo. De ahí la elección de este modelo", explican desde Ford a Valencia Plaza.

¿Cómo funciona Ford BlueCruise?

Pero, ¿cómo funciona BlueCruise? Esta tecnología de asistencia a la conducción autónoma, pero con la vista en la carretera permite retirar de forma segura las manos del volante y el pie del acelerador gracias a que el vehículo lleva incorporados dos sensores en la parte posterior y otro en la delantera que detectan las marcas de los carriles y las condiciones cambiantes del tráfico. De esta forma, en todo momento recibe información sobre lo que hay alrededor del coche para que el sistema de asistencia controle la dirección, aceleración, frenado y posición del vehículo en su propio carril. 

Pero, además, el coche lleva también incorporada una cámara digital en su parte delantera que en tiempo real controla los límites de velocidad que indican las señales de tráfico para regular la velocidad. Además, el sistema mantiene constantemente la distancia adecuada al tráfico que lo precede, llegando incluso a reducir velocidad y arrancar de nuevo en situaciones de tráfico lento. 

¿Cuándo se pueden levantar las manos del volante? En España únicamente se podrá utilizar en autovías y autopistas, principalmente en rectas y curvas suaves. "Al final, lo que se prima es la seguridad. Por tanto, se activará en vías que tengan una mediana y que no sean de doble dirección. También influye el radio de las curvas, por lo que las que son más pronunciadas se considera que el piloto debe tener el control", indican desde la compañía.

En el cuadro de mandos hay también otra cámara de infrarrojos que monitoriza la mirada y la posición de la cabeza del conductor, con el fin de garantizar que sus ojos permanecen fijos en la carretera. Es capaz de detectar la mirada incluso con gafas de sol. De esta forma, en caso de que el piloto se distraiga o lleve tiempo sin mirar frente a la calzada, el sistema emite avisos al monitor advirtiendo de que debe prestar atención a la conducción. 

Y es que BlueCruise se ha diseñado para en momento determinados levantar las manos del volante, pero siempre estar atentos a la carretera. Eso sí, solo se podrá utilizar esta solución cuando la pantalla del cuadro de instrumentos indique que es seguro. Será entonces cuando el conductor podrá retirar las manos de la dirección sin apartar la vista de la vía y el sistema se encargará de adecuar el ritmo al de los demás vehículos hasta llegar a la velocidad máxima permitida. Además, de forma autónoma se posicionará siguiendo las marcas viales y marcando una clara distancia de seguridad, gracias a sus sensores.

"Está previsto para una conducción muy relajada. No provoca merma en la autonomía ni un mayor consumo eléctrico porque lo único diferente es que la dirección funciona por sí sola, pero sigue siendo eléctrica", puntualiza la compañía. Por tanto, no hay un tiempo máximo de uso ni kilómetros concretos marcados. Asimismo, está previsto que en caso de desvanecimientos o de imprevistos durante la conducción asistida, el sistema poco a poco vaya reduciendo la velocidad hasta llegar a los 10 km/h. Nunca llega a detenerse porque la idea es que el coche nunca tome la responsabilidad ni el control total.

Suscripción y activación del servicio

La conducción sin manos estará disponible cuando se active a través del menú de ajustes de asistencia al conductor, pero solo se pondrá en marcha en las vías públicas autorizadas, es decir, autopistas y autovías. Para ello, habrá que suscribirse. Los clientes tienen la posibilidad de probar BlueCruise durante 90 días de forma gratuita como periodo de prueba y siempre dentro del primer año desde la compra del vehículo. 

Al final de este período, o en cualquier otro momento tienen la opción de activar este sistema por un precio de 24,99 euros mensuales. No existe compromiso de permanencia mínima para activarlo. Por ejemplo, un cliente podría dar de alta este servicio durante un único mes para usarlo y no volver a activarlo hasta un año después.

"Este es otro hito en el firme compromiso de Ford con la tecnología punta y la seguridad. Tras convertirnos en el primer fabricante de automóviles en introducir la tecnología de conducción 'sin manos, con la vista en la carretera' en Europa, ahora somos el primer fabricante en obtener la aprobación para introducir este sistema de asistencia en España", destacó Jesús Alonso, presidente y consejero delegado de Ford España.