VALÈNCIA. La pretemporada sigue su curso tras los primeros días de ejercicio en Paterna bajo el tipico calor sofocantes de estas fechas por estos pagos. Gattusso ha comenzado a observar el material del que dispone hasta que no se produzcan las salidas que van a poder originar las entradas para reforzar el equipo.
En la actual plantilla existe un nutrido grupo de futbolistas que se encuentra ante su última oportunidad. Bien sea por edad, rendimiento, duración de su contrato o por la cantidad de masa salarial que ocupan con su ficha, se van a ver las caras ante un ultimátum en su trayectoria. O convencen en la pretemporada a Gattuso, o lo mejor para todos va a ser buscar una salida.
1. Cillessen: el caso del meta neerlandés reúne todas las premisas comentadas anteriormente. El guardameta tiene 33 años, y aunque es cierto que su rendimiento no ha sido malo, las lesiones le han dejado muy lejos de ser un portero en quien confiar toda una campaña. Todavía quedan casi 9 millones de euros por amortizar del contrato del meta que ocupa una gran cantidad de masa salarial debido a su alta ficha. Acaba contrato en 2023 y la temporada anterior acabó cediendo la plaza de titular ante el empuje de Giorgi Mamardashvili. El deseo del club es deshacerse de él desde hace ya dos veranos pero el mercado en recesión no presenta ofertas considerables dignas de ser tenidas en cuenta.
2. Cömert: un claro ejemplo de mal rendimiento. Llegado el momento de la decisión tomada por el Valencia de incorporar al suizo pese a que el anterior cuerpo técnico se decantó por opciones que no fueron atendidas. Pese a su vitola de internacional por Suiza, el central tuvo un rendimiento muy bajo. Al final, sólo disputó 9 partidos (8 de liga y 1 de copa) y se percibió que no le cogió el aire a la liga española en ningún momento. Hasta tal punto era evidente la diferencia de nivel que Bordalás situó en su orden de preferencias a Mosquera por delante del suizo (o incluso retrasar la posición de Guillamón) cada vez que había alguna contingencia que dejara a Gabriel, a Alderete o a Diakhaby fuera de combate. Ahora le toca dar un paso al frente porque el helvético tiene contrato hasta 2026.
3. Toni Lato: con 24 años y contrato hasta 2023 Toni Lato no ha conseguido nunca quitarse la vitola de "suplente de Gayà". La alargada sombra del capitán y su ascendencia sobre el grupo llevaron al de la Pobla incluso a salir cedido en la campaña 19/20, primero a PSV Eindhoven donde no jugó nada y después a Osasuna donde tampoco tuvo excesivos minutos. Esta temporada además ha tenido un handicap en las lesiones que lo lastraron cuando mejor estaba tras ayudar al equipo a meterse en la final de Copa jugando casi todo el partido de vuelta de semifinales en el que entró tras la lesión de Gayà. A .los 5 minutos del siguiente partido de liga ante el Granada, el de La Pobla se rompió tambien. Todo ello unido a la meteórica progresión de Jesús Vázquez abren la incógnita de su futuro. Si Gayà acabara no saliendo, hay overbooking en esa posición y Lato (a un año de acabar) parece el rival más débil.
4. Racic: el mediocentro serbio es otra de las víctimas de un cuestionable rendimiento. Llamado a dar un paso adelante tras las salidas en verano de 2019 de Kondogbia, Parejo y Coquelin, el balcánico no ha acabado nunca de gobernar la zona ancha con la suficiente autoridad como para hacerse con una plaza de titular. La temporada pasada sus números fueron muy pobres para un futbolista llamado a ocupar un lugar en el centro del campo e incluso Bordalás prefirió un doble pivote con Guillamón y Wass a ntes que darle la manija al serbio. Con 24 años, tiene contrato hasta 2024 (esta campaña que viene y la próxima. Gattuso ha estado muy pendiente de rectificarle mucho en la primera semana de trabajo. Es el año de su despegue, o de su rendición definitiva.
5. Koba Leïn: irrupción destacada y frenazo. Desde la aparición del neo caledonio en la pretemporada de 2019 en Crans Montana de la mano de Marcelino, pronto se adivinaron en el centrocampista formas y detalles que convidaban al optimismo. Sin embargo, no ha acabado de completar la progresión que se le supone. Con 20 años y contrato hasta 2025 es uno de los futbolistas en el que se tienen depositadas muchas esperanzas. Comenzó jugando en Copa y algún rato suelto en liga con Bordalás, pero acabó desapareciendo hasta quedar ubicado en la instrascendencia. Pese a que en enero de 2022 se le dio ficha del primer equipo, a partir de ese momento sus apariciones comenzaron a disminuir siendo especialmente significativo el episodio del partido de liga en el Bernabeu sacándolo en la segunda parte del encuentro y sustituyéndolo antes del final del partido.
6. Maxi Gómez: quizá el caso más claro de jugador del que se esperaba mucho más. Por encima del coste de su traspaso (14´5 millones de Euros, Santi Mina y la cesión dos temporadas de Jorge Sáenz), el centrodelantero uruguayo en ningún momento ha estado ni siquiera cerca de una cifra convincente de goles (9 en la 19/20, 7 en la 20/21 y 5 en la 21/22); incluiso en la temporada 20/21 sumó la escalofriante cifra de 1.000 minutos sin ver puerta en la liga. Además su carácter le ha jugado malas pasadas tanto en roces con los respectivos entrenadores cada campaña como con expulsiones como la que sufrió en el descanso de la ida de las semifinales de Copa en San Mamés que le impidió ayudar al equipo en semifinales y final). A todos estos condicionantes se une su alta ficha y con una amortización aún pendiente de su fichaje de 12 millones de euros, pensar en un traspaso es una quimera que probablemente no haría sino aumentar las pérdidas de la entidad. El jugador parece contar de salida entre los favoritos de Gattuso, pero también comenzó igual la temporada anterior y fue perdiendo posiciones ante los goles y el empuje de Guedes y Hugo Duro. Está obligado a luchar por revalorizarse.
7. Marcos André: el fichaje más caro del pasado verano (casi 10 millones de euros) no ha demostrado el porqué de esa inversión. Sus mejores momentos, el gol salvador en el descuento ante el Athletic en Mestalla en liga jugando los de Bordalás con uno menos, y la segunda parte de la victoria 3-4 ante el Levante en el Ciutat jugando más en la izquierda que como delantero. Todavía tiene mucho contrato por delante y podría rehabilitarse en una idea de juego como la de Gattuso que contempla más posesión de la pelota y buscar más la portería contraria. Este segundo año puede marcar su trayectoria en el Valencia CF.
8. Manu Vallejo: uno de los preferidos para la afición y que incluso ha actuado como revulsivo en más de una ocasión. Sin embargo hay una realidad incuestionable, el gaditano no ha sido titular para ninguno de los entrenadores que ha tenido en el Valencia en estas tres temporadas (Marcelino, Celades, Voro, Gracia y Bordalás), ni para los dos que ha tenido este año en la media temporada cedido en el Alavés (Mendilibar y Julio Velázquez). El gaditano está llamado a pelear en la pretemporada para convencer a su nuevo entrenador de su utiilidad para el grupo. De lo contrario, la opción de la cesión estaría de nuevo sobre la mesa (si no es que llega una oferta por él). En los primeros días de pretemporada se le ha visto muy activo. Sin duda sabe que puede estar ante su última oportunidad de hacerse un hueco en el estadio de Mestalla.