Foto: Carme RipollésCASTELLÓ. El entrenador del CD Castellón, Óscar Cano, apenas tuvo cinco minutos para explicar el partido en la rueda de prensa posterior al choque. Y lo que más hizo fue repartir elogios. Y es que, como él dice, "Óscar Cano no ha traído el equipo hasta aquí... ha sido con Óscar Cano".
En opinión del técnico granadino, que en la temporada pasada salvó a un equipo desahuciado que se veía abocado a la Tercera División, otro podría haber hecho su misma labor. Su único mérito, según señaló en rueda de prensa es este: "El equipo necesitaba una persona que no estuviese demasiado bien de la cabeza, me gustan los equipos grandes, los retos. Esto es trabajo de los jugadores y del que está a mi izquierda (en referencia a Elías Martí). Yo lo único que he hecho es pensar cómo quería que jugara mi equipo y él lo verbalizaba. Ha hecho un trabajo técnico increíble que me ha permitido a mi estar donde creo que los técnicos marcan diferencias: hacer que los jugadores crean en ellos".
Por ello, Cano dio las gracias "a los jugadores y muchísimas gracias a Elías". Preguntado por sus palabras del sábado anterior, cuando tras perder contra el Logroñés dijo que volvería como entrenador de Segunda, el míster albinegro reconoció el farol: "También prometí que iba a ir al gimnasio tres veces a la semana y no lo he cumplido. A veces me pasa como a los políticos". Eso sí, señaló que en aquel choque "no nos merecíamos la derrota" y que la recuperación comenzó por lo más sencillo y lo más complicado a la vez: "Todo parte por creer que es posible".
El preparador orellut también tuvo palabras de elogio para la afición, "para esa gente que no para de mandarme mensajes... me siento querido y respetado". Y es que "la principal energía que tiene este club es su gente", reconoció. La fiesta inundó en ese momento la sala de prensa y Cano dio por terminada la rueda de prensa... y por comenzada la fiesta.
