VALÈNCIA. Que la plantilla del Valencia CF está descompensada y muy mal hecha es una realidad que a estas alturas escapa ya a muy poca gente. De hecho es una plantilla con carencias en algunas posiciones y un sonrojante overbooking en otras.
Una de esas posiciones con un exagerado overbooking es la portería. Durante 4 meses de competición de la pasada campaña a Bordalás se le juntaron 4 guardametas en los entrenamientos. En el verano de 2021 Murthy pretendía traspasar a Jasper Cillessen y sacar del equipo a Jaume Doménech para quedarse con Christian Rivero y con un Giorgi Mamardashvili que ya comenzaba a despuntar.
Por ese motivo se le dijo a Rivero en un primer momento que se contaba con él y que no buscara equipo. Se le comunicó a Jaume que no se contaba con su concurso, pero el de Almenara se aferró a su contrato renovado dos temporadas atrás y que finalizaba en 2023. Además se le buscó acomodo a Cillessen pero no llegaron ofertas por él después que el holandés se hubiera pasado casi toda la campaña 2020/21 en blanco debido a sus lesiones. Cuando el club quiso reaccionar, ya no fue posible encontrar acomodo para Rivero que comenzó la temporada.
La temporada la comenzó jugando Mamardashvili ante la nueva lesión en verano de Cillessen, que en principio era el elegido por Bordalás para ostentar la titularidad. Tras las 6 primeras jornadas, el guardameta holandés relevó al georgiano y cuando todo hacía presagiar que sería el caucásico quien jugaría la Copa del Rey, sorprendentemente Bordalás se decidió por Jaume (que aguantaría en Copa la titularidad hasta las cuartos de final). Otra vez Rivero volvía a salir perjudicado del overbooking bajo los palos.
Así que el club le buscó en enero una cesión al Alcorcón. El equipo madrileño se encontraba en una complicada situación en la tabla y buscaron en el guardameta de La Safor un revulsivo para voltear la mala dinámica. Al final la cesión resultó ser ruinosa. Rivero sólo jugó tres partidos en un equipo que acabó colista en la categoría de Plata, encajó dos goles de media por partido, no ganó ninguno de los encuentros que disputó y no ha servido lo más mínimo para seguir con la progresión apuntada por el gandiense en los partidos que jugo en la Copa de la temporada 20/21.
Dado que este verano el Valencia CF ha sido incapaz de traspasar ni un sólo jugador a estas alturas de temporada, Gennaro Gattuso volverá a encontrarse con el mismo problema para el comienzo del trabajo en Paterna la próxima semana: tendrá que trabajar con 4 guardametas.
El club espera encontrarle salida a un Cillessen que sabe que va a tener muy complicado salir y que desea disputar el mundial a toda costa. Como quiera que la cita mundialista es en el mes de noviembre, necesita un club en el que actuar como titular ya que Van Gaal ya le ha dejado bien claro que para ser el guardameta titular de los Países Bajos en el campeonato del mundo necesita ser titular en el equipo en el que milite.
Esa es actualmente la gran baza del conjunto de Mestalla a la hora de aligerar la nómina de guardametas. Además, en el caso del neerlandés se matarían dos pájaros de un tiro ya que Cillessen ocupa una parte importante de masa salarial, uno de los actuales quebraderos de un club que, como reconoció su directora financiera Inma Ibáñez, está con el fair play financiero muy sobrepasado.