VALÈNCIA. Otro mercado devastador para el Valencia CF. La ventana de fichajes de invierno vuelve a marcar un antes y un después en el proyecto fallido de Meriton en el área deportiva. La política de fichajes del Valencia 'cansó' otra vez a un entrenador, Gennaro Gattuso, que acabó pactando su salida del club y deseando suerte a Voro ante el "complicado" reto que tiene por delante.
Las reuniones de Gattuso con Peter Lim en Singapur no han tenido el efecto prometido, todo lo contrario. De hecho, el Valencia ha trasladado diferentes mensajes sobre sus intenciones en el mercado, ha cambiado el plan y su estrategia hasta finalmente cerrar la ventana sin ninguna incorporación por segunda vez con Meriton -ya lo hizo en el verano de 2020-.
El Valencia comenzó transmitiendo que no tenía la necesidad de realizar ningún movimiento en el mercado. Ninguna posición estaba 'coja' en palabras del director técnico, Miguel Ángel Corona, y el equipo había interiorizado la idea de juego de Gattuso. Sin embargo, conforme los resultados comenzaron a torcerse... el discurso pegó un 'bandazo'.
Gattuso en el brindis de Navidad confirmó que necesita dos fichajes: un centrocampista y un banda. No necesitaba un pivote porque ya tenía dos en la plantilla: Hugo Guillamón y Nico González. El italiano sufrió dos contratiempos serios que evidenciaron las carencias de la plantilla. El gallego cayó tres meses y Castillejo se fracturó la muñeca.
De este modo, Gattuso contaba con dos efectivos menos en dos parcelas con las posiciones sin doblar y sus peticiones incluso se rebajaron. Pasó a pedir la llegada de un centrocampista con experiencia que pudiese jugar en todas las posiciones de la medular. Pero las opciones que planteó el club no convencían al entrenador, cuya prioridad era Nahitan Nández (Cagliari) o Saúl Ñíguez (Atlético de Madrid). Finalmente, tras pactar su salida con el Valencia, el portavoz del club confirmó que era "complicado" que llegasen fichajes en lo que supone otro mercado devastador para la credibilidad de Meriton.
