CASTELLÓ. Pablo Hernández es uno de los capitanes del CD Castellón, y el jugador del plantel albinegro con una hoja de servicios más destacada. En el verano de 2021 rescindió el año de contrato que le restaba con el Leeds United y llegó como el gran fichaje de esa campaña. Su rendimiento no ha sido el esperado, pero ahora le llega la oportunidad de hacer historia con su club del alma desde el terreno de juego. Esa fue su motivación para vestir de albinegro abandonando Inglaterra, donde es considerado una leyenda en Leeds.
Esta semana Pablo Hernández ha visitado las instalaciones de Castellón Plaza para participar en el programa Conexión Orellut, donde ha compartido sus sensaciones de cara a esta dura eliminatoria de play off ante el histórico Deportivo de La Coruña. Estas son algunas de sus reflexiones.
"Estos son los partidos que a todo jugador le gusta jugar, vivir estos momentos y ante un rival como el Deportivo es algo que se vive pocas veces. Tenemos ganas de que llegue el domingo. Tengo ya experiencias vividas en el fútbol en mi carrera profesional, pero aun así es especial, tanto el partido como la eliminatoria. Es el todo o nada, o lo haces bien y pasas la eliminatoria o te vas para casa. A pesar de lo vivido, es especial y siempre se lleva con un poco más de nervios".
"En estos partidos no va a haber un equipo que pase por encima del otro, sino que va a haber momentos para ambos y el que mejor sobreviva en los malos momentos y menos errores cometa, superará la eliminatoria. Está muy igualada, a priori, a principio de temporada, el favorito hubiera sido el Deportivo, pero los méritos de uno y otro nos han puesto de frente y en la liga regular hemos sido un poco mejores que ellos, pero ahora importan las dinámicas y quien gestiona mejor los momentos de sufrimiento en el partido. Conocemos a muchos de sus jugadores, a su entrenador y sabemos que allí, sabiendo el hándicap que tienen en caso de empate, van a tener que arriesgar más... y tenemos que aprovechar eso y hacerles daño".
"Este año he tenido menos lesiones, pero menos continuidad cuando he estado disponible, y ahora me encuentro bien y con ganas de ayudar al equipo como el entrenador decida. Sé que no se ha visto al Pablo Hernández al nivel que venía del Leeds, no han salido las cosas, no soy de poner excusas, así que por una parte frustrado, pero por otra tranquilo.
El día del Real Unión me sentí a gusto, necesito estar en contacto con el balón, participar en el juego. El año pasado empecé bien, pero me lesioné y luego cogí el covid y eso complicó el poder recuperar ese nivel; y este año me he sentido mejor, pero con menos continuidad y eso me ha dificultado coger confianza y recuperar mi nivel. Llego con muchas ganas a este play off de ayudar al equipo. El entrenador decide el once y lo que decida habrá que aceptarlo, somos 24 en la plantilla y todos queremos jugar".
"No se puede ir allí a tumba abierta, a que sea un correcalles, pero tampoco podemos ir a encerrarnos y a ver lo que el Deportivo propone. Tenemos que ir a hacer nuestro partido, a decirles que si nos quieren ganar tendrán que hacer muchas cosas bien. Esto no lo va a ganar el once que salga, sino todos los que participen. Vamos preparados, sabiendo cómo podemos hacer daño, cómo van a intentar hacernos daño, y tenemos claro qué hacer y cómo hacerlo y ojalá el partido se dé para ello.
El nuevo técnico solo lleva dos partidos, pero lo conocemos del año pasado. Podemos esperar un Deportivo muy vertical, atrayendo la presión para, a partir de ahí, buscar pases entre líneas y luego atacar la línea defensiva. Saldrán a apretarnos, a hacer una presión alta porque en defensa sufren más y querrán evitar que nuestra gente de ataque tenga espacios.
He tenido la suerte de jugar en Riazor en Primera División y sé que aprietan mucho; es un club con una gran afición y merecen estar más arriba en el fútbol, igual que el Castellón".
"Hay que ser conscientes de que el verano pasado pensábamos que había mucha incertidumbre y que iba a ser una temporada de transición, pero se hicieron bien las cosas, empezamos bien y nos vimos con opciones de quedar primeros. Eso ha hecho que el objetivo cambiara radicalmente. Después cogimos una mala racha y no hemos podido pelear por esa primera plaza como queríamos, pero el fútbol nos dejó en el play off como terceros. Es una segunda oportunidad, a pesar de todo, y vamos a intentar a provecharla".
"Una vez acabe el play off veré cómo me encuentro, tengo un año más de contrato, pero hasta que no acabe la temporada no decidiré. Mi prioridad al venir fue intentar ayudar a ascender con el CD Castellón a Segunda División. Soy el primero al que le hubiera gustado que aquí se viera al Pablo del Leeds, yo sabía al venir que esa presión que me autoimponía jugaba en mi contra, era consciente de que no iba a ser lo mismo que en Inglaterra, que es complicado y diferente jugar en estas categorías, pero aun así tomé la decisión que tenía que tomar junto con mi familia. Vine al Castellón para conseguir un objetivo como club, no personal. Sabía que tenía que poner por delante al club por encima de lo personal y no me arrepiento de la decisión que tomé.
Me encantaría celebrar el ascenso, lo he hecho como aficionado de Segunda B a Segunda y ojalá pudiera, describiría la imagen por la que volví al Castellón, poder celebrar algo tan grande junto a la afición, familia y amigos".