CASTELLÓ. El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha aprobado a Grupo Pamesa la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para la apertura de una mina de arcillas blancas y arenas feldespáticas en la localidad turolense de Estercuel. La mina, denominada Elena, extraerá alrededor de 400.000 toneladas de arcilla anualmente, en un periodo estimado de actividad de 24 años.
La aprobación de la DIA impone una serie de medidas para asegurar la conservación del yacimiento arqueológico Peña Rubia, como mantener los caminos de acceso y las balsas resultantes de la explotación carbonífera de la Compañía General Minera.
Esta concesión minera ocupa una superficie total de 80 hectáreas entre los términos municipales de Estercuel y Gargallo, y, para iniciar su actividad, Pamesa prevé arrendar 200 hectáreas de suelo, de las cuales 117 serán de propiedad municipal.
Por último, esta explotación tiene previsto generar alrededor de 100 puestos de trabajo, tal y como ya avanzó el presidente del grupo azulejero, Fernando Roig en junio. De ellos, entre 15 y 20 estarán destinados a la extracción de arcilla y el resto al transporte de esta hasta los centros de tratamiento de Castellón.
Tal y como ya señaló Roig, con ello Pamesa Grupo Empresarial cumple su objetivo de estar lo más cerca posible del origen de las materias primas y autóctonas, en lugar de importarlas desde lugares más lejanos.
