CASTELLÓN (EP). La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, ha lamentado la situación de "abandono" a la que considera que somete la alcaldesa, Amparo Marco, y su equipo de gobierno al Hogar Virgen de Lidón de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que "por primera vez en su historia se han visto obligadas a renunciar a una subvención anual por las condiciones inasumibles para la congregación que les han impuesto".
Carrasco se ha expresado así tras hacer la tradicional visita a los usuarios del recinto para felicitar las fiestas de Navidad, así como a las monjas encargadas de la gestión del recinto y prestación del servicio. Junto a ella han estado los concejales Vicent Sales, Salomé Pradas, Vicente Guillamón y María España, además de otros cargos del Partido Popular, como el secretario general Sergio Toledo, y el presidente de NNGG Castellón, Cristián Ramírez.
"El sectarismo de PSPV y Compromís no conoce límites", ha apuntado Carrasco, quien ha explicado que lo primero que hicieron nada más llegar fue reducirles la subvención que recibían del Ayuntamiento, "despreciando la encomiable labor social que realizan las hermanas que gestionan el centro".
Ahora, Marco "se saca de la manga unas condiciones que las monjas no pueden cumplir y, por tanto, dejarán de percibir una ayuda de 30.000 euros", tal y como ha denunciado la portavoz 'popular', según le ha explicado la madre superiora de la orden en Castellón.
Para la portavoz del PP, "esto es una vuelta de tuerca más en la estrategia de asfixiar el trabajo que realiza la organización, por el simple hecho de estar ligada a la Iglesia". Al respecto, ha indicado que otros colectivos con menos resultados no tienen tantos problemas para trabajar ni para recibir subvenciones. "Y lo peor de todo es que el consistorio cierra el año con superávit, y ese dinero se va a los bancos, en lugar de atender las necesidades de los vecinos", ha criticado.
En este sentido, ha recordado que ya hace dos años que la Generalitat Valenciana recortó las prestaciones que tenía el centro, eliminando el servicio de médico que tenía, teniendo desde ese momento que asumirlo la congregación, "sin tener en cuenta que allí hay 140 personas de avanzada edad que necesitan recibir atenciones".
El Hogar Virgen de Lidón de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados atiende a un colectivo de 140 personas ahora mismo, y tienen empleados a 40 personas, además de los profesionales médicos, según han informado los 'populares' en un comunicado. "Es un centro de referencia, con una labor social que merece todo el reconocimiento de los castellonenses y que, gracias a su labor, se presta un servicio que precisamente no está cubriendo ni la Generalitat Valenciana ni el Ayuntamiento de Castellón, responsables de prestarlo", ha explicado Begoña Carrasco.
Carrasco ha querido con su visita, un año más, "reconocer todo lo que han apartado a Castellón nuestros mayores", y ha incidido en su compromiso de orientar el trabajo del Ayuntamiento hacia un colectivo "que cada vez es más numeroso, que tiene una problemática específica, y que puede y debe seguir aportando muchas cosas en la construcción de la ciudad de Castellón que todos queremos".