VALÈNCIA. Las faraónicas obras del canal de acceso de València cumplen su primer aniversario. La actuación, que soterrará las vías ferroviarias para coser los barrios del sur, prevé durar hasta 2027 ó 2028 y cuando se supera el primer año desde que empezara, ya se pueden comprobar los primeros trabajos de preparación antes de empezar a construir el túnel. Los plazos se cumplen y no hay perturbaciones en los trabajos, según el presidente de Adif, Ángel Contreras, quien explicó este viernes la marcha de las obras conforme a las previsiones iniciales.
Cabe recordar que las obras, iniciadas en la primavera del pasado año, se desarrollarán en nueve fases, que en su momento detalló este diario, y prevén durar un lustro. Así pues, la adjudicataria del megacontrato, la UTE conformada por Dragados y Rover, ya ha finalizado los trabajos referentes a la primera de las fases y se dispone a iniciar la segunda.
En concreto, este fin de semana se finalizará el desvío de las vías ferroviarias de alta velocidad que conectan con Madrid. Se han construido unas vías ferroviarias temporales paralelas a las existentes, y según explicó el presidente de Adif, la siguiente fase consiste en desviar las vías del Corredor Mediterráneo. Un movimiento cuyo objetivo es desplazar lateralmente el tráfico ferroviario para liberar hasta el 80% del espacio de la playa de vías actual y, de esta manera, poder empezar a construir el túnel.
Para el túnel se empleará un método que permite simultáneamente la actividad de construcción en el subsuelo mientras siguen pasando los trenes en superficie. Esta técnica, denominada "cut and cover", consiste en insertar en el suelo los paneles verticales que serán las paredes del túnel, y sobre ellos, la losa que funcionará de techo. De esta manera, la losa se recubre y, mientras en la zona inferior se ejecutan los trabajos de excavación y construcción, en la superior, continúa la actividad del día a día.
Para hacer posible este proceso, entre septiembre y febrero se completaron la totalidad de las estructuras: pantallas, muros y una losa de fondo entre pantallas de un millar de metros cuadrados. Y de manera previa, los primeros trabajos consistieron en la reposición de los servicios públicos ubicados en la traza del canal. Se acondicionaron más de 50.000 metros cuadrados de terrenos, se demolieron más de 30.650 metros cuadrados de losas y muros y se excavaron 200.000 metros cúbicos de tierra, la mayor parte de la cual se ha reutilizado en la obra.
Para la construcción del túnel, ya se han excavado 900 metros de pantallas hasta 30 metros de profundidad, y se han colocado más de 2.000 toneladas de acero y alrededor de 20.000 metros cúbicos de hormigón en lo que será parte de la estructura del túnel. Se han empleado tres apantalladoras, y uno de sus retos se ha desarrollado bajo el puente de la ronda sur, dado el poco espacio que hay bajo el mismo para desarrollar los trabajos y la necesidad de excavar junto a los pilares.
Así pues, Adif ha instalado equipos de control para detectar posibles movimientos del puente, conectados a un sistema de lectura continua con aviso de alarmas bajo un estricto protocolo de seguridad. En este primer año, se han realizado más de 1.300 ensayos sónicos. En este sentido, Contreras ha destacado "la complejidad técnica y el punto de inflexión que representa este proyecto para la transformación de la movilidad de los valencianos".
Por lo que respecta a las obras de remodelación y ampliación de la estación de València Joaquín Sorolla y la urbanización del entorno, se avanza en la construcción del edificio exterior para uso comercial de viajeros y ciudadanos, que tendrá cerca de 2.000 m2, y cuyos trabajos estructurales están "prácticamente finalizados". Todo ello junto a numerosos desvíos de servicios: alumbrado, señalización, agua potable, saneamiento, telefonía, comunicación y otros.
El presidente de Adif destacó que del total de inversión, un 75% ya se encuentra contratada para las actuaciones de integración de las vías de acceso a las estaciones y la remodelación de València Joaquín Sorolla, así como la instalación de los sistemas de seguridad y comunicaciones. Las obras adjudicadas a la UTE Dragados-Rover costarán 443 millones de euros.
Completan el proyecto otras obras en fase de redacción: instalaciones de protección civil y seguridad de los túneles de acceso a València; nuevo cambiador en el entorno del Nudo Sur/Fuente de San Luis; estacionamiento de apoyo para trenes en el área de Fuente de San Luis; adecuación de los túneles de ancho convencional; e instalaciones de Control, Mando y Señalización (CMS).