VALÈNCIA (EFE). La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha dicho que el tope al gas de emergencia planteado por la Comisión Europea "no es una propuesta seria, es una tomadura de pelo", y ha asegurado que la actitud de la institución comunitaria "tiene que cambiar muchísimo" para que haya un acuerdo.
En declaraciones en el Congreso de los Diputados, Ribera ha manifestado este miércoles su "indignación", y ha avanzado que le consta que hay estados miembros que van a decir que o se hace una propuesta seria o dejan de respaldar las propuestas de la Comisión "en otros temas que le puedan resultar importantes a ella".
"Tengo la impresión de que va a oír cosas muy duras por parte de la mayoría de ministros", ha vaticinado la vicepresidenta tercera del Gobierno, que ha lamentado que la Comisión no haya presentado su planteamiento "hasta el último minuto" y "con unas condiciones, un diseño y una efectividad (...) que lo hace prácticamente inviable".
"Lo más dramático es que le hemos pedido que nos presente una propuesta y esto no es una propuesta en serio, es una tomadura de pelo", ha recalcado.
Desde su punto de vista, el tope al gas propuesto este martes por la institución, que fija el precio máximo en 275 euros el megavatio hora (MWh) para episodios excepcionales, "genera el efecto contrario al deseado" e "induce un incremento artificial de precios, poniendo en riesgo todas las políticas de contención".
En este sentido, la ministra ha reiterado que España se opondrá "rotundamente" a una medida que muestra "hasta qué punto la Comisión no se ha tomado en serio este ejercicio".
"Hay un nivel de indignación muy alto", ha añadido Ribera, que ha admitido que entre los socios europeos "hay un sentir bastante contrariado", si bien se ha reservado una valoración de conjunto y la horquilla de precios que están analizando.