CASTELLÓ. Uno de los futbolistas que más ajustes ha tenido que hacer dentro del modelo de juego implantado esta temporada por el Castellón es Salva Ruiz. El lateral zurdo, que inició el curso con una función más ofensiva en esa banda izquierda, ha pasado a convertirse en una pieza fija en la línea de tres centrales, posición que está defendiendo con aplomo en estos primeros meses de competición.
El futbolista valenciano jugó los cuatro primeros partidos de Liga como carrilero, pero en la quinta jornada, coincidiendo con la baja por lesión de Alberto Jiménez, fue utilizado por Dick Schreuder en el eje de la zaga. Desde entonces, ha permanecido ahí.
El pasado domingo, frente al Ibiza, fue elegido por la afición albinegra como el mejor de su equipo, demostrando el buen momento en el que se encuentra y confirmando que su nuevo rol en el once inicial del Castellón está plenamente afianzado.
No es casualidad que el de Albal haya sido titular en la totalidad de partidos de Liga disputados hasta ahora por el Castellón, con un rendimiento sobresaliente tanto en defensa como en ataque.
En labores de contención, Salva Ruiz participa con acierto en los repliegues que hace el equipo tras pérdida de balón, contribuyendo a minimizar las contras de los rivales. Asimismo, en la faceta ofensiva interviene de manera activa con llegadas al área contraria. Hace dos semanas estrenó su cuenta de goles del presente curso marcando en la victoria lograda en el feudo del Recreativo Granada.
El capitán albinegro, que ya fue una pieza importante para el Castellón en las dos anteriores temporadas, ha multiplicado su incidencia en el juego del equipo en la campaña actual, siendo el líder de la línea de tres que ha implantado Schreuder.