CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Sant Joan de Moró ha aprobado una adenda al convenio urbanístico que le permitirá obtener los terrenos para construir el nuevo colegio público, que por fin parece cerca de materializarse. Las obras del centro educativo están ligadas a la urbanización del Sector 1 y, para lograr la titularidad del suelo, el consistorio debe aprobar la modificación puntual 1/2018 del PGOU, también en tramitación. La parcela educativa, de más de 11.000 metros cuadrados, estará emplazada en la avenida Borriol.
La carambola urbanística está en vías de resolverse satisfactoriamente. En la adenda ya aprobada, el consistorio ha pactado con los tres propietarios de los dos solares donde se asentará el colegio una indemnización anual conjunta de 464 euros por la cesión del aprovechamiento urbanístico. Ese pago dejará de realizarse cuando empiecen las obras de urbanización del Sector 1, de 184.495 metros cuadrados, dado que esta urbanización proporcionará el terreno educativo a la Generalitat.
Además del nuevo colegio, en ese punto de Sant Joan de Moró está prevista la construcción del futuro instituto, aunque en este último caso aún no existe un compromiso firme de la Conselleria de Educación.
El consistorio que dirige Vicente Pallarés y la Administración autonómica pactaron las obras del nuevo colegio ante la imposibilidad de ampliar el actual, ubicado en la calle del Secretario Abel. El centro público, inaugurado en 1996, cuenta con capacidad para 450 alumnos repartidos en seis unidades de segundo ciclo de Educación Infantil y 12 unidades de Primaria, pero se ha quedado pequeño ante el notable aumento de la población en Sant Joan de Moró.
La intención municipal es que antes de finalizar el año esté redactado el proyecto constructivo para que en 2022 se puedan licitar las obras y estas concluyan antes del inicio del curso escolar 2023-2024.
En materia urbanística, el consistorio de Sant Joan de Moró también tramita la modificación puntual 1/2019 del PGOU, que permitirá obtener el suelo dotacional para ejecutar un vial de servicio en el tramo de carretera de la CV-160 que discurre por el Polígono Industrial Partida Rachina. Para trazar ese vial, el Ayuntamiento debe dar antes la condición de solar a las parcelas que serán urbanizadas. El consistorio ya ha aprobado el informe ambiental y territorial estratégico de la modificación del PGOU.