CASTELLÓ (EFE). La Guardia Civil de Castellón ha detenido a tres integrantes de una red criminal dedicada a cometer estafas usando el método conocido como 'estafa al CEO' y de la que fue víctima una empresa de Onda, que sufrió un perjuicio económico de más 77.000 euros tras el cobro fraudulento de una factura de luz.
A lo largo de la investigación se ha podido constatar que la citada red había conseguido recaudar unos 300.000 euros en varias estafas más, cometidas en distintas provincias españolas, a otras empresas utilizando las mismas técnicas, según fuentes del instituto armado.
La investigación que ha concluido con la detención en el municipio valenciano de Aldaia de estos tres ciberdelincuentes, por presuntos delitos de estafa y blanqueo de capitales, comenzó en agosto de 2019 por el Equipo de Delitos Informáticos y Telemáticos (EDITE) de la Comandancia de la Guardia Civil de Castellón.
En esa fecha, recibió una denuncia presentada por un representante de una empresa azulejera de la Onda que había sido víctima de una estafa, en la que sufrió un perjuicio económico de más 77.000 euros tras el cobro fraudulento de una factura de luz.
En el 'modus operandi' utilizado por estos ciberdelincuentes, conocido como estafa al CEO (BEC fraud), los estafadores se valen de técnicas de ingeniería social y acceden a sus víctimas de manera ilícita con el fin de robar datos, comprometiendo las comunicaciones de la empresa.
Engañan a los responsables de estas, haciéndoles llegar un correo electrónico (como es el caso investigado) en el que los criminales se hacen pasar por una empresa de suministros, solicitándoles el pago de la factura de la luz.
Posteriormente, la persona que recibe la transferencia del dinero fraudulento en la cuenta aportada a la empresa perjudicada, comienza a realizar pequeñas transferencias del dinero recaudado a la cuenta bancaria de terceras personas implicadas en la red delictiva.
Estos individuos, conocidos como "mulas económicas", finalmente extraen el dinero en cajeros y lo entregan en metálico a los escalones superiores de la organización delictiva, quedándose una parte del dinero recaudado en pago por su labor. La instrucción del caso ha sido llevada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Nules.