El ministro presenta en València el Any Estellés, sin el apoyo de la Generalitat y esquiva reunirse con el Conseller
VALÈNCIA. 800 metros separan el Centre de Cultura Contemporània Octubre de Les Corts Valencianes. En el primer lugar, el Ministro de Cultura Ernest Urtasun; en el segundo, el Vicepresident y Conseller de Cultura, Vicente Barrera. 800 metros son un paseo; pero institucionalmente, es suficiente para dar a entender la ausencia de lazos entre la Generalitat y el Gobierno de España en materia cultural.
En primer plano, el Any Estellés, al que ya se han sumado, en mayor o en menor medida, todas las administraciones a excepción de la Generalitat. Pero en la primera visita oficial de Urtasun a València, que no se haya reunido con algún representante de la Conselleria habla de un trasfondo más serio.
Ernest Urtasun ha intentado sortear la evidencia y ha explicado, ante la insistencia de los periodistas, que su agenda en València ha incluido la Cremà de anoche, una reunión con la Federació d'Instituts d'Estudis Valencians, y la presentación de la agenda de actividades de la conmemoración Cent de Estellés en el que se implicará el Ministerio.
En su discurso, el ministro ha resaltado dos ideas: el Gobierno no va a dejar de atender sus prioridades con la Comunitat Valenciana (en materia de tejido cultural y sociedad civil), ya sea con o sin Barrera; y la falta de sintonía institucional tampoco afectará al compromiso de la administración central con sus negociados valencianos. “Valencia es una prioridad para este ministerio y lo seguirá siendo. Somos conscientes de las necesidades y seguiremos trabajando en ellas”, ha declarado en la rueda de prensa.
Sin entrar al barro, Urtasun ha querido marcar de manera clara la distancia ideológica y política que le separa del conseller de Vox. Sobre la ausencia de la administración autonómica en la conmemoración del poeta, ha sido tajante: “La importancia de Vicent Andrés Estellés en nuestra literatura es clara. Yo estoy aquí y lo tengo claro; quien no lo tenga, tendrá que ser el que de explicaciones”. Además, ha deslizado que el Ministerio no se implica en la celebración por ausencia de la Generalitat, sino por motivación propia.
La sala estaba abarrotada con la plana mayor de la oposición al gobierno de PP-Vox. Joan Baldoví, Verònica Ruiz, Glòria Tello, Joan Ribó o Isaura Navarro, por parte de Compromís; Maite Ibáñez y Pilar Bernabé, por parte del PSPV-PSOE. Esta última, como Delegada del Gobierno, ha ido más lejos que el ministro al afirmar que el desplante de Barrera con Estellés es otra prueba “de las políticas retrógadas” del gobierno de la Generalitat.
Por otra parte, para el Vicepresident Barrera, Urtasun ha venido a hacer “apología del catalanismo”. Según recoge Europa Press, a 800 metros de distancia, el dirigente de Vox ha declarado que le habría gustado que Urtasun "se hubiera puesto en contacto con la Conselleria para poder abordar muchísimos temas que tenemos pendientes" y que no "se hubiera ido directamente a hacer actos unilateralmente junto con Acció Cultural del País Valencià", entidad que ha calificado como el "máximo órgano del independentismo y el pancatalanismo de esta ciudad”.
"Lo que a mí me hubiera gustado personalmente es que se hubiera venido aquí a solucionar muchos problemas que tenemos en el IVA, en Les Arts y que no se hubiera dedicado a hacer apología del catalanismo", ha manifestado, menospreciando otra vez el centenario del poeta de Burjassot.
Urtasun sorteando a Barrera y a la Conselleria de Cultura; Barrera tachando de “pancatalanista” la visita de un ministro. Este toma y daca no es el primero de la legislatura ni parece el último. Barrera ya se ha posicionado en contra del plan del Gobierno para descolonizar los museos, y de las declaraciones del Ministro sobre los actos de censura institucional llevados a cabo en algunas localidades y comunidades autonómicas en las que gobierna la derecha.
El titular de la Conselleria de Cultura llegó a instar a crear un frente común "ante cualquier injerencia”: "Dentro del marco de la legalidad nos opondremos a las instrucciones o medidas que consideremos que van en contra de la libertad y de la igualdad cultural”, declaró, además de acusar a Urtasun de “dictar la cultura” en vez de “fomentarla”.
Por su parte, el Ministro de Cultura ha dejado claro que una de las líneas del Ejecutivo será, precisamente, hacer otro dique de contención contra la censura institucional, un punto que Sumar llegó a llevar en su programa electoral del pasado 23J.
Entre diques de contención, con los presupuestos prorrogados, es muy posible que se vuelva a atrasar el plan museológico del Museu de Belles Arts, la adecuación del González Martí, o las actuaciones urgentes en el patrimonio histórico de Sagunto, entre otros muchos asuntos que necesitan de esta colaboración, por ahora inexistente.