ORIHUELA Óscar Ferrer, vocalista de Varry Brava, se refugia estos días de calor en Orihuela Costa. Lo hace antes de afrontar la gira por festivales durante el verano que el domingo 29 de julio les lleva una vez más al Low Festival de Benidorm, con el que compartirán cartel con otras bandas del indie español como Deluxe, Miss Caffeina o Vetusta Morla. Allí presentarán las canciones de Varryvisión, su último trabajo editado después de su paso por el Benidorm Fest y el hit Raffaella, y que ha ensanchado todavía más sus cotas de éxito y popularidad. Antes de la vorágine de festivales, Ferrer charla con Alicante Plaza.
-¿Qué tal está funcionado 'Varryvisión' y las canciones que habéis lanzado?
-Está funcionado muy bien. Esta gira está basada en un homenaje y un guiño a la televisión. Es un homenaje a la tele y la nostalgia, y el recuerdo que nos trae; a los momentos que hemos pasado delante de la tele escuchando música. Y también aprovechamos para reivindicar más música en la tele. En directo, es un show que hemos montado por todo lo alto, para disfrutarlo y transmitirlo a toda la gente que viene a vernos.
"VARRYVISIÓN Es un homenaje a la tele y la nostalgia, y el recuerdo que nos trae; a los momentos que hemos pasado delante de la tele escuchando música"
-El conciertos que hacéis en un festival, como puede ser el Low, es diferente a que el público puede ver en las fiestas de un pueblo o en una sala...
-Sí, sobre todo porque los tiempos también son diferentes. No es una cuestión nuestra, sino que así lo marcan los propios festivales. Hay muchas más bandas y tiene que ser más corto. Nos adaptamos a eso. En el caso del Low, el formato será con toda la banda y toda la escenografía, solo que en los festivales tocamos menos canciones.
-Sonarán más canciones nuevas o más los grandes éxitos de Varry...
-Intentamos compensar para que haya canciones de todos los discos. Y luego, tocamos los últimos temas. Solemos hacerlo así. El objetivo es ver cómo funcionan; cómo reacciona la gente...
-¿Hasta qué punto la participación en el Low Festival ha supuesto un puesto de inflexión?
-Si, desde el primer momento lo fue. Y un punto de apoyo para seguir creciendo. La primera vez que tocamos en el Low el festival se llamaba Low Cost Festival y participamos en un concurso de bandas, y lo ganamos. Pudimos tocar allí por primera vez. Cada vez que vamos es un festival que nos da mucha energía con un apoyo brutal de la gente, que nos aguanta hasta la siguiente edición a la que volvemos. En el Low nos quiere mucha gente; formamos parte de él, y nos sentimos como en casa.
"En el Low nos quiere mucha gente; formamos parte de él, y nos sentimos como en casa"
-Con todos esos años de trayectoria, ¿notáis cambios en la escena musical? Hay muchos festivales que son la gran oportunidad, pero ¿las salas resisten?
-Lo que acabas de decir es lo que sucede: los festivales son la gran oportunidad y en las salas es difícil tocar, sobre todo, para las bandas jóvenes porque tiene muchos gasto: alquilar un furgoneta; llevar las cosas, alquilar la sala...Es muy complicado para una banda que empieza. Por eso es muy importante que las bandas noveles participen en los festivales para que crezcan. Tampoco hay tantos concursos para bandas que comienzan, a diferencia de los que nos pasó a nosotros con el Low. Para nosotros fue importante, no por el dinero, sino por el hecho de formar parte de un cartel.
Y si es verdad, la escena ha cambiado mucho. Hay muchas bandas, es muy difícil para los noveles entrar en los festivales. Cuando Varry empezó, era relativamente más sencillo. Lo bueno de ahora es que uno puede cogerse cualquier programa para hacerse sus propias canciones. Y por lo tanto, hay muchas más canciones y hay muchos más puntos de vista en la cultura musical; no es necesario estar una gran compañía, pero hay que currárselo muchísimo. Todo tiene sus ventajas y dificultades como las nuestras.
-¿Qué recomiendas a la banda que ahora comienzan?
-Que intenten tocar en salas. Si el proyecto necesita de instrumentos, que intenten simplificarlo y que las canciones vayan por delante. El proyecto tiene que basarse en buenas canciones y tocarlas donde puedas. Si tienen que ir con una base programada, pues vayan así. Las canciones tienen que ir por delante; es lo que hace que una banda crezca. Hay que tocar para que la gente te vea. Yo tiene muchos nervios cuando empezaba; lo pasaba muy mal sobre el escenario, pero esas barreras hay que romperlas. Cuando se rompe, se crea la magia con la gente. Pero hay que ser valiente.
"A las bandas que empiezan, les recomiendo que intenten tocar en salas"
-Cuando pasen los festivales, ¿habrá gira por salas?
-Ahora estamos componiendo mucho para tener muchas canciones. En los dos últimos años, después de Raffaella, han venido muchas canciones, casi sin planteárnoslo. Nuestra fórmula es componer una canción, darlo todo ahí y publicarla. Ahora estamos con una dinámica de componer más de dos canciones, pero no sé si formará parte de un disco más adelante. En definitiva, estamos metidos en la composición y tocar los festis. ¿La gira de salas? Es un tema que nos apetece mucho, pero hay que ver que sea factible.
-Es decir, ¿qué estáis en un bueno momento de producción y composición?
-La verdad es que sí. Siempre hemos intentado ser muy positivos con eso. Los hacemos con ganas; nos curramos muchas cosas, más allá de lo que pueda parecer. Sabemos que las bandas que son referencia para nosotros lo hacían así.
-¿Qué bandas eran esas?
-Mecano, Nacha Pop, Pet Shop Boys, Madonna. Los grandes clásicos que han sido vanguardia, que han sido valientes, aprendiendo...Eso es lo que nos gusta hacer.
Hablamos con Albaro Arizaleta, batería, voz y compositor del grupo pamplonés, que actuará el próximo 29 de julio en el Low Festival de Benidorm