VILA-REAL. La ciudad de Vila-real se encuentra en estos momentos con un vacío en el área de Cultura difícil de comprender. El consistorio ha decidido prescindir del programador escénico del municipio, Domingo Martínez, a pesar de la larga experiencia que acumula como gestor y a pesar de que en ningún momento se había puesto en duda su continuidad durante los tres años que viene ocupando despacho en el Auditori. Esta situación se suma a cierto malestar que hay en Vila-real desde hace ya muchos meses por la ausencia de programación cultural, como muestra el hecho de que la mayoría de las actividades que se organizan responden a citas institucionales, de asociaciones locales o de colegios o institutos.
Martínez se incorporó hace tres años a la concejalía de Cultura después de resultar elegido en un concurso público por el cual se convertía en el programador municipal durante dos años fijos, con dos años más variables (el contrato se renovó por un nuevo periodo hace un año y finalizaba en junio del 2025). La sorpresa ha llegado cuando cumplido el primero de esos dos años se le ha anunciado la renuncia a la ampliación de la licitación. Fuentes municipales apuntan a que el motivo por el cual Vila-real ya no cuenta con el coordinador artístico son problemas económicos del Ayuntamiento.
Domingo Martínez Belaire ha sido el impulsor de eventos tan exitosos como el festival de magia o el FITCarrer, junto con Pau Ayet, y en su haber cuenta con un premio Max en la categoría de espectáculo de calle por su participación como productor en el espectáculo teatral de la compañía Animasur. Precisamente tras la entrega de este prestigioso galardón en abril del año pasado, desde el Ayuntamiento se publicó en redes sociales una felicitación en la que afirmaban sentirse “muy orgullosos de contar con un profesional como él, que aporta gestión, talento y creatividad en el ámbito cultural de Vila-real”.
La marcha del coordinador artístico no es el primer golpe que sufre la actividad cultural en la capital de la Plana puesto que en los últimos meses se ha cancelado el festival de cine ‘Vist’, se ha aplazado el festival ‘Màgia per ací’ y ha desaparecido el abono de artes escénicas del Auditori (uno de los últimos espectáculos teatrales que se pudo ver fue el monólogo de Eugeni Alemany que tuvo lugar en el mes de enero). Algunas de las marquesinas en las que se publicita la actividad cultural muestran actividades celebradas hace meses y las redes sociales de Cultura están inactivas desde que ha comenzado el año.
Lo que ocurrirá a partir de ahora es toda una incógnita. Domingo Martínez ha dejado antes de abandonar el departamento la rejilla cultural correspondiente a Otoño preparada, con actividades, representaciones, contactos y cachés negociados, por si los responsables en el consistorio quieren sacar adelante algún tipo de programación. Hay que tener en cuenta que con el reciente pacto de gobierno en Vila-real, la concejalía ha cambiado de manos. Hasta ahora estaba liderada por Noelia Samblás y ahora será Dora Saura (Compromís) quien la gestione. Otro de los asuntos que tendrán que abordar es el proyecto '750 anys de creació artística', enmarcado dentro del aniversario de la ciudad y con el que se busca destacar el talento de los autores locales.
El pasado 23 de junio finalizó el plazo para que los interesados se inscribieran en el listado de artistas plásticos que protagonizarían exposiciones colectivas desde el segundo semestre del año y hasta febrero del 2025, y la respuesta ha sido insuficiente para poder organizar estas muestras. En las últimas semanas la concejalía está planteando cómo reprogramar la exposición y hasta el momento del cambio de titular de la cartera no había nada cerrado. Mientras la parte técnica de Museos está estudiando cómo adecuar esta iniciativa, Cultura deberá decidir si recoge el guante y sigue adelante con '750 anys de creació artística' o no.