VALÈNCIA. 'Cambio de escenario: el Tesoro paga por primera vez en dos años por colocar sus Letras a 12 meses'. Así titulaba este diario el pasado 3 de mayo hablando de uno de los históricos activos financieros preferidos por los ahorradores conservadores en España. El otro, sin duda, los depósitos bancarios. Pues bien, desde aquel día el Tesoro Público, que pagó un interés medio del 0,078%, ha saldado las cuatro subastas posteriores con subidas y cada vez con mayores rentabilidades.
El pasado 7 de junio abonó el 0,4790% por su deuda a un año; el 5 de julio el 0,687%; el 9 de agosto el 0,781%; mientras que la última celebrada hasta la fecha, que tuvo lugar el pasado 6 de septiembre, puso sobre la mesa el... ¡1,408%! La siguiente tendrá lugar este martes 4 de octubre y el repunte está asegurado ante una inflación desbocada, que está obligando a los bancos centrales a intensificar el endurecimiento de la política monetaria. O lo que es lo mismo: subir los tipos de interés.
Y todavía más viendo como el dato preliminar del IPC de la Eurozona, publicado por Eurostat el pasado viernes, se situó en un histórico 10%. La principal causa de la subida fue el incremento de los precios de la energía (+40,8%) tras poner fin la ligera moderación que se había registrado en julio (+39,6%) y agosto (+38,6%). Por su parte, la inflación dio una tregua a España el mes pasado al apearse del doble dígito, hasta el 9%, con datos avanzados del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Una presión inflacionista que va a ir a más teniendo en cuenta que se acerca el frío en Europa y Rusia cortando el suministro de gas, lo que encarecerá más los productos energéticos. De este modo, los bancos centrales van a continuar elevando las tasas y más un rezagado BCE. Con este panorama, las Letras del Tesoro seguirán ofreciendo cada vez mejores rentabilidades, recuperando así el atractivo perdido en los últimos años con la política de 'tipos cero'.
Una situación que llega en plena revisión al alza de los depósitos bancarios -o cuentas remuneradas-, que comienza a dejarse ver en España tras haberlo hecho al otro lado de los Pirineos. En este sentido conviene recordar, tal y como contó Valencia Plaza hace casi un mes, ya había entidades en Europa que pagaban más del 1% a un año vista e incluso uno, el Progretto italiano, el 2%. Todos ellos integrados en Raisin, líder en el mercado paneuropeo de productos de ahorro con más de 750 depósitos, camino de los 800.000 clientes repartidos en una treintena de países y, entre ellos, España.
¿Y por qué no los españoles le preguntaba este diario a Mónica Pina, responsable de Raisin en España e Irlanda. "Hasta el momento los grandes bancos españoles se han mostrado cautelosos ante los nuevos aumentos de tipos, y es que la mayoría ha visto un crecimiento significativo del volumen de depósitos y cuentas con respecto al año pasado, por lo que no está claro que necesiten atraer más liquidez. No obstante, en las últimas semanas hemos visto cómo algunos más pequeños han comenzado a subir la remuneración de sus productos de ahorro o incluso a lanzar nuevas ofertas para captar clientes, por lo que es posible que la próxima subida del BCE incentive mayores rentabilidades entre estas entidades", respondía entonces antes de conocer la decisión de la institución europea.
El endurecimiento de la política monetaria del BCE no tardó en llegar en la reunión del mes pasado, cuando elevó los tipos en 75 puntos básicos hasta el 1,25%. O lo que es lo mismo: el nivel más alto desde 2011. Y la respuesta de las entidades de Raisin no se hizo esperar: más intereses para los inversores/ahorradores. El pasado viernes 30 de septiembre ya eran nueve las que pagaban más del 1% a 12 meses y, al frente de ellas, Banca Progretto con el 2,20% TAE.
¿Y la banca española? Pues comienzan los movimientos al alza de los depósitos, cuentas remuneradas o combinadas a un año de vencimiento. Ahí están los casos de Openbank con un 2,58%; Banco Farmafactoring (2,27%; EBN Banco, cuyo depósito 'Sinycon Combinado', abona el 2%; o, por citar otro, Banco Finantia (1,60%).