VALÈNCIA. Sensaciones encontradas entre el comercio y la hostelería ante el plan de desescalada en la Comunitat Valenciana. Las medidas anunciadas por el jefe del Consell, Ximo Puig, han provocado el rechazo de los bares y cafeterías que las ven una "injusticia", mientras que el comercio respira aliviado. "Muchas empresas van a permanecer cerradas, ya que estas condiciones continúan siendo un cierre encubierto", advierte el presidente de Conhostur, Manuel Espinar.
Diferentes reacciones a unas restricciones que, según recalcó el 'president', se asientan en la "máxima prudencia" en aras de evitar que, de nuevo, la evolución de la curva de contagios y fallecimientos por el coronavirus se dispare en la autonomía.
En concreto, la Generalitat decretaba este jueves la reapertura de la hostelería a partir del próximo 1 de marzo, pero únicamente de las terrazas, con un máximo de cuatro personas por mesa y hasta las 18 horas, con un aforo del 75%. Por su parte, el comercio podrá abrir hasta las 20 horas y con un aforo del 50%, tal y como este sector había solicitado.
Unas medidas que no contentan a la hostelería, que considera que no responden a sus expectativas para iniciar la reapertura, debido a que estas condiciones no hacen "viable la actividad". Así, el sector había solicitado a la Conselleria de Sanidad aforos al 100% en las terrazas y al 30% en el interior de los establecimientos, tras 40 días de cierre. Pero, por el momento, tendrán que esperar. "En estos momentos y con una tasa de incidencia más baja, sin embargo, se nos continúan aplicando las restricciones más duras", lamenta la Confederación Empresarial de Hostelería y Turismo de la Comunidad Valenciana (Conhostur).
Una situación que, consideran, no va a paliar la asfixia financiera de los negocios. De hecho, prevén que muchos establecimientos de hostelería y ocio permanecerán con la persiana bajada porque no puedan asumir el coste de abrir. "Solicitamos que estas medidas se revisen a la mayor brevedad para poder ampliar la actividad al aforo interior, así como la ampliación del horario, ya que estas condiciones continúan siendo un cierre encubierto", incide Manuel Espinar, presidente de la patronal de la hostelería en la Comunitat Valenciana.
Asimismo, reclama que se mantenga la potestad de cada empresa de decidir abrir o no y que esto quede determinado en el decreto que regulará las nuevas medidas autonómicas para que "se mantengan las condiciones de los ERTE en aquellas empresas que no puedan abrir". "Los espacios de socialización más seguros que existen en estos momentos son los establecimientos de hostelería, frente a los domicilios particulares", defiende Conhostur.
Fotur: "No viven la realidad"
Desde la Federación de Ocio, Turismo, Juego e Industrias Afines de la Comunitat Valenciana (Fotur), su presidente, Víctor Pérez, muestra la decepción de un sector hastiado y duramente golpeado por los efectos de la pandemia. Los locales nocturnos podrán reabrir en horario diurno, pero recuerda que no todos tienen terrazas ni les compensa un regreso tan gradual. "Muchos no van a abrir, porque no compensa. Esperábamos por lo menos el 100% de las terrazas. No entendemos que no haya sido así, porque si se cumple el distanciamiento social entre mesas no vemos problema", señala.
Tampoco entiende la prohibición de que DJ y artistas musicales puedan ejercer su actividad, si las personas están sentadas en las mesas consumiendo. "¿Se puede escuchar música de Spotify, pero no en directo? ¿Cuál es la diferencia? No lo entendemos. Se está jugando con 1.500 puestos de trabajo y el pan de muchas familias que comen de esta profesión", critica.
A su juicio, los políticos "no viven la realidad de lo que cuesta abrir un negocio cada día". "Deben salir más de los despachos", asegura. Según sus estimaciones, un 30% de los establecimientos vinculados con alguna actividad del sector ya ha cerrado de forma definitiva en la Comunitat Valenciana, y advierte: "Si las cosas siguen así, al final nos quedaremos sin ocio".
CEOH: "Cada día cierran 50 locales"
"Disconformidad y rechazo". Eso es lo que siente la Coordinadora Empresarial de Ocio y Hostelería de la Comunidad Valenciana (CEOH), que recalca que unos 8.000 establecimientos en la Comunitat no cuentan con terraza. Además, reclama que estos espacios al aire libre puedan abrir al 100% de su capacidad mediante la ampliación de las superficies por parte de las autoridades municipales competentes. "Resulta necesario y urgente reclamar la participación de la Federación de Municipios y Provincias en las mesas de negociación para poder fijar criterios que se implanten por igual en todas las ciudades y pueblos de la Comunidad Valenciana", exige.
Según señalan, a la vista de la evolución de la pandemia en la autonomía, "no tiene ningún sentido que se pretendan implantar por otros 14 días las medidas que impiden la recuperación de la actividad en el interior de los locales y la hora de cierre". Y es que, según sus estimaciones, en la Comunitat Valenciana "cada día 50 locales de ocio y hostelería cierran con pérdidas acumuladas de cerca de 120.000 euros".
Confecomerç: "Es un alivio"
En cambio, desde el comercio celebran que se hayan atendido sus peticiones. En este sentido, el presidente de Confecomerç CV, Rafael Torres, admite que estas medidas suponen "un alivio", ya que los comercios estaban sufriendo las consecuencias de estas limitaciones con "un impacto económico en la actividad comercial". "La ampliación de horario permitirá a los clientes disponer de mayor margen para poder realizar las compras, y las ciudades de más de 50.000 habitantes se verán liberadas del perimetraje los fines de semana”, destaca.
Por tanto, agradece la "sensibilidad" de la Generalitat hacia el pequeño comercio. "Es uno de los más afectados por esta crisis, al haber levantado estas restricciones, siendo necesario mantener un equilibrio entre la gestión sanitaria y la económica”, ha resaltado Torres.