CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló licita las atracciones navideñas y la feria artesanal para un periodo más reducido por la covid-19. A diferencia de lo que era habitual hasta ahora, otorgándose la autorización de ocupación de vía pública desde antes de Nochebuena y hasta después de Reyes, el permiso de este año solo comprende una semana, del 31 de diciembre al 6 de enero. En total, se proponen 12 puestos en emplazamientos estratégicos de la ciudad con el propósito de diversificar la oferta.
El certamen de venta colectiva de productos tradicionales se mantiene en la avenida Rey don Jaime y contempla cinco casetas, de 10 metros cuadrados cada uno. Por lo que respecta a los espectáculos infantiles, tales como trenecitos o juegos de salto, el pliego considera cuatro ubicaciones distintas. Al igual que años anteriores, las infraestructuras se proyectan en Fadrell (una de 49 m2), plaza España (cuatro: 81 metros cuadrados, 90 m2, 128 m2 y 20 m2), Huertos Sogueros (hinchable de 88 metros cuadrados) y plaza María Agustina (espectáculo ferial de 36 m2).
"Esta oferta debe ajustarse a lo que determine el Cecopal o Sanidad para dar cumplimiento a las medidas sanitarias. Además, va sujeta a reservarse por parte del Ayuntamiento las acciones que estime oportunas en caso de suspensión por el aumento de contagios o la evolución de la pandemia", advierte el portavoz del gobierno municipal, José Luis López.
En este sentido, el concejal valora cualquier hipotético escenario dentro de unas semanas. De hecho, ante la fluctuación epidemiológica ni siquiera se atreve a aventurar a día de hoy cómo se desarrollará la Cabalgata de Reyes, que "seguro que no será como la de otros años. ¿Cómo será? Dependerá de la situación de aquí a entonces y lo que podamos plantear en ese momento", subraya.
A principios de noviembre la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, ya anticipó que el desfile "seguramente no se celebre tal y como la conocemos tradicionalmente, porque es imposible controlar la ciudadanía en una cabalgata así", señaló.
"Haremos que vengan los Reyes Magos y vendrán igual a traer los regalos porque los niños de Castelló han sido un ejemplo en esta pandemia, pero les veremos de otra manera. Si no es en una carroza, será en una moto de la Policía o en un camión de bomberos, pero vendrán y los niños dormirán con ilusión", indicó Marco.
La decisión definitiva de cómo se organizará el evento se tomará unos días antes de la fecha señalada. Los constantes cambios respecto al nivel de contagios y la incidencia por 100.000 habitantes obligarán a apurar al máximo los plazos para garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias. En consecuencia, habrá que esperar todavía a que avance el calendario. La fórmula finalmente escogida tendrá una pizca de imaginación, como está ocurriendo en otras ciudades españolas.