El PP de Castellón deja en 'stand by' el cambio de su sede provincial por la covid-19

CASTELLÓ. El PP de Castellón deja en stand by su cambio de sede provincial por la covid-19. La mudanza programada tras las elecciones del 28A de 2019 sufre una hibernación al priorizar la acción política como consecuencia de la crisis derivada por la pandemia, que marca la agenda desde hace más de 9 meses, cuando se declaró por primera vez el estado de alarma en marzo.

A pesar de que se manejan hasta tres alternativas posibles, sin descartar más en el futuro, fuentes cercanas al comité ejecutivo admiten que el traslado del domicilio social no forma parte en estos momentos de la hoja de ruta. No obstante, insisten en que esa renovación se producirá sí o sí una vez se den las circunstancias adecuadas, cumpliendo de esta forma las directrices marcadas por el presidente, Miguel Barrachina, después de los comicios locales.

Las mismas fuentes apuntan que la muda de piel no solo busca relanzar la imagen social con ese horizonte de 2023, año que se presume especialmente ajetreado por el apretado calendario electoral. También persigue optimizar los recursos y espacios, teniendo en cuenta que el actual local en el Camí de la Plana se ha quedado anticuado y demasiado grande para la organización interna. En consecuencia, la necesidad pasa por encontrar un establecimiento moderno, funcional y céntrico.

En el extrarradio

Al respecto, el PP es la única formación, dentro de las que ostentan representación en la Diputación Provincial y en el Ayuntamiento de la capital de la Plana, que se localiza en el extrarradio de la ciudad. Tanto el PSPV-PSOE como Compromís, Ciudadanos, Unides Podem y Vox cuentan con sedes mucho más cercanas, lo que facilita la interacción entre cargos institucionales y orgánicos, además de aportar ventajas a la hora de realizar gestiones administrativas.

Antes de la irrupción de la pandemia, y de acuerdo con esas instrucciones dadas por Barrachina, los populares se marcaron como objetivo culminar el traslado de bártulos a finales del pasado año. Tomando como referencia iniciativas precedentes, como la campaña electoral de 2011, en la que se alquiló un bajo en el centro para transformarlo en el foro 2.0, la dirección provincial se lanzó a la búsqueda de un local. La prospección de mercado no aportó los resultados esperados, de manera que se amplió el plazo, pero siempre con la premisa de acometer la metamorfosis visual en el menor tiempo posible.

De hecho, se habló de ello en distintas juntas directivas. Sin embargo, con el coronavirus en plena expansión, el proyecto quedó un tanto aparcado, hasta que ahora se ha considerado pertinente dejarlo en modo espera al entender que las preferencias van en otra dirección. En este contexto, ni siquiera el presidente del PPCS ha aclarado su continuidad pese a que en junio de 2021 se celebrará el congreso provincial. Al menos, según determinan los estatutos.