El PSOE aspira a un Gobierno monocolor y se burla de que el PP apele a la triple alianza

VALÈNCIA. (EP). El PSOE aspira a conformar un Gobierno "monocolor" tras las elecciones generales del 28 de abril y por eso no ha entrado a valorar posibles pactos poselectorales, ha afirmado este lunes el secretario de Organización del partido y ministro de Fomento, José Luis Ábalos.

En rueda de prensa en el Palacio de Neptuno --la sede de Ferraz está en obras--, Ábalos ha dado cuenta de la reunión de la Ejecutiva Federal del partido, la primera que se celebra tras el anuncio del adelanto electoral.

Ante los medios de comunicación, Ábalos se ha burlado de estrategia puesta en marcha por el PP, que apela a la triple alianza con Ciudadanos y Vox para gobernar, lo que demuestra, a juicio de Ábalos, que ya renuncian a ser primera fuerza. "Por eso plantea (el PP) los pactos, la tripe alianza de la derecha. Ni siquiera le da con dos", ha comentado.

Frente a esa estrategia del PP, el PSOE aspira a formar un Gobierno monocolor, a partir de una "mayoría netamente socialista", que sea capaz de entenderse con unas fuerzas y con otras como han demostrado en estos meses al frente del Ejecutivo, ha explicado Ábalos.

El 'número tres' ha intentado también dejar en evidencia al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, por advertir de que "no pactará con socialdemócratas" mientras "le cuesta menos" gobernar con el apoyo de Vox en Andalucía. "Un poco extraño eso en el contexto europeo", ha señalado Ábalos, en alusión al cordón sanitario que en algunos países europeos los partidos liberales e incluso conservadores han establecido en torno a la extrema derecha.

Ábalos ha recordado también el viraje ideológico de Ciudadanos, que comenzaron, ha dicho, definiéndose como socialdemócratas, para luego hacerse liberales y ahora ya ni eso, a juzgar por las "compañías" que tienen, ha deslizado en referencia a Vox.

Pero sobre todo, Ábalos ha intentado contraponer el deseo de "integrar" que tiene el PSOE con la "cultura de la expulsión" que, a su juicio, practican PP y Ciudadanos, obsesionados, a su juicio, por echar a Pedro Sánchez de La Moncloa.

El secretario de Organización ve a su partido "más movilizado que nunca" y con un "relato nítido" con el que presentarse a las elecciones, como representa el hecho de haber preparado unos Presupuestos para "restaurar muchas de las lesiones" que provocó la crisis y que se ha bloqueado por "intereses espurios".