CASTELLÓ. El Camí La Plana de Castelló ha abierto este viernes al tráfico tras nueve meses de obras que han servido para remodelar íntegramente sus 3,8 kilómetros de longitud y transformarlo en un nuevo corredor verde y de ocio al aire libre para la ciudad y en un vial iluminado de forma sostenible mucho más seguro para viandantes, ciclistas y vehículos.
La actuación, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el Ayuntamiento, suma 4.504.000 euros de presupuesto y es una de las doce operaciones incluidas en la Estrategia de Desarrollo Urbano Integrado y Sostenible EDUSI-Transforma Castelló, que proyectará en la ciudad inversiones por 20,2 millones de euros hasta 2022.
La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, ha visitado la zona junto al concejal de Urbanismo, Rafa Simó. La primera edila ha destacado que el proyecto recupera y pone en valor un camino "emblemático" como es el Camí La Plana y mejora la accesibilidad "en un vial que conecta Castelló con el mar". Marco ha resaltado la mejora al tráfico rodado que implica esta operación materializada gracias a la inversión europea, y los beneficios para residentes a la hora de acceder a sus viviendas. "Es una gran mejora para los vecinos y vecinas de Castelló, y para todas aquellas personas que transiten por este nuevo espacio que invita al ocio saludable", ha dicho Marco.
En este mismo sentido se ha pronunciado el edil Simó, que ha señalado que uno de los objetivos del proyecto era mejorar la seguridad en el Camí La Plana, "y ello pasaba por limitar la velocidad, que será de 50 kilómetros por hora". El reto se logra también con la instalación de siete badenes y la separación física de la zona de circulación rodada y la reservada a bicicletas y peatones.
Entre los puntos más destacados del proyecto, ejecutado por la empresa Becsa, figura la implementación de un carril ciclopeatonal de 3,8 kilómetros que transcurre en paralelo a la emblemática acequia de La Plana que vertebra el camino, descubierta en el último de sus tramos y cuyo valor se ha reforzado con un mirador en el extremo este del vial.
Este carril ciclopeatonal blinda la seguridad de viandantes y ciclistas e invita a la actividad física al aire libre. Incorpora 23 bancos anexos a arbolado para garantizar la sombra; y cuatro fuentes, dos de ellas con doble seno adaptadas a personas con movilidad reducida. También se han colocado 20 pasos de peatones, marcados superficialmente sobre la acerca para las personas invidentes.
El pavimento del renovado Camí La Plana se ha realizado con asfalto fonoabsorbente para mitigar la contaminación acústica, y se ha apostado por alumbrado de bajo consumo en todo el vial. Este es uno de los mayores cambios del renovado Camí La Plana, que antes de las obras carecía de iluminación. Ahora 160 farolas dobles (con un brazo hacia la calzada y otro hacia la vía ciclopeatonal) y con tecnología led garantizan la correcta iluminación del trazado.
La remodelación del Camí La Plana arrancó el pasado 11 de marzo y ha durado justo nueve meses. Con la actuación, Castelló da un paso hacia el modelo de ciudad sostenible e inclusiva al que aspira. El proyecto contiene una vertiente de compromiso medioambiental, al sumar con esta transformación del espacio un nuevo anillo verde para la capital de la Plana y ampliar la red de carril bici, reforzando con ello el uso del transporte sostenible con bajas emisiones de carbono y alternativo al motorizado.
El nuevo Camí La Plana "es un proyecto que crea ciudad, que la reconvierte es un espacio más amable, con potencialidades y acorta distancias entre las personas que la habitan", ha concluido Marco.