CASTELLÓ. El servicio gratuito de asesoramiento y atención psicológica para personas mayores puesto en marcha por el Ayuntamiento de Castelló ha realizado 462 servicios de atención durante todo 2020 y asistido a 45 personas, un año marcado por la covid-19 y que llevó a la Concejalía de Gente Mayor a derivar este servicio a la vía telefónica para mantener esta necesaria atención durante el confinamiento y a duplicar las horas para garantizar la atención a todas aquellas personas mayores que la requirieran. El total de servicios realizados supera en número a los efectuados desde 2017 a 2019.
“El servicio de atención y asesoramiento psicológica a personas mayores se ha convertido en un servicio necesario, especialmente desde que se decretó el estado de alarma por la emergencia sanitaria y social por coronavirus”, ha indicado Isabel Granero, concejala de Gente Mayor. Granero ha recordado que durante las semanas de confinamiento se derivó este servicio a la vía telefónica y que poco después se duplicaron las horas de atención para dar servicio a todas las personas que lo solicitaban, dado el aumento de solicitantes. “Un servicio que ha sido todo un apoyo para aquellas personas mayores que han necesitado asesoramiento durante una pandemia que está afectando a este colectivo”, ha apuntado.
El servicio de asesoramiento y atención psicológica a personas mayores es un servicio gratuito que el Ayuntamiento de Castelló puso en marcha en 2007, junto al colegio Oficial de Psicología de la Comunitat Valenciana, como proyecto pionero enmarcado en el plan ‘Castelló, ciudad amigable con las personas mayores’.
A lo largo de 2020 se han atendido a 45 personas y se han realizado un total de 462 servicios de atención, notándose un importante aumento a partir del mes de abril. Entre 2017 y 2019 se atendieron 104 personas y realizado más de 400 citas.
Este servicio gratuito dirigido a personas mayores de 60 años y empadronadas en Castelló es un recurso de atención individual dirigido a objetivos como la prevención de problemas psicológicos relacionados con el envejecimiento, el análisis de alternativas para lograr actitudes positivas, ayuda a la adquisición de habilidades sociales o mejora de la autoestima, entre otros.
A lo largo del pasado año se ha percibido una alta participación. Entre los casos más habituales abordados por los y las profesionales del servicio, se ha incorporado el del manejo de la ansiedad por la situación sanitaria, por el exceso de información y por la desinformación, así como la necesidad de ser comprendidos y abordar la situación de soledad, aislamiento social y miedo. “Este servicio ha sido una herramienta muy útil de acompañamiento a aquellas personas mayores que lo han pasado mal desde que se decretó el estado de alarma por coronavirus”, ha añadido Granero.