Febril actividad

Economía débil. Se mire al sector que se mire. Si vamos a grandes empresas caen los beneficios y las ventas como nunca, si hablamos de los bancos, desde el BCE (Banco Central Europeo) y el Banco de España se habla de fusiones porque las cuentas no salen, si pensamos en el turismo las cifras son aterradoras. Nada menos que en estos meses han debajo de venir a España más de 7 millones de turistas. En cuanto a la restauración miles y miles de empresas piensan en el cierre porque no pueden asumir sus gastos de suministros y sobretodo mantener las nóminas. Las cifras del paro se disparan al igual que las de los cotizantes de la seguridad social.  Los indicadores económicos son negativos, el PIB, el consumo, la bolsa,…Se necesita un rearme político, económico y social para superar la situación. Y es difícil. Las ayudas iniciales aprobadas por la UE, esos 140.000 millones no llegarán, al menos una primera partida, hasta bien entrado 2021 porque antes habrá que presentar unos presupuestos con garantías que sean bendecidos por Bruselas, siempre y cuando se consiga y se superen las cuitas partidistas de unos y otros.

Responsabilidad política. Se les pide a los políticos, a los que están en el Gobierno que son quienes deben gestionar y a los de la oposición que deben apretar al Ejecutivo, responsabilidad y diligencia. No puede ser que se produzcan reuniones necesarias en el último momento, que se legisle según el lugar donde vives (ha ocurrido con las medidas sanitarias o con la vuelta al cole). Está en juego la salud de los españoles y su desarrollo social y en muchos casos su supervivencia económica. De acuerdo que estamos ante una crisis global inopinada. Pero es en estos momentos cuando se tiene que demostrar la capacidad de liderazgo y gestión para intentar paliar la crisis. Y aquí no hablamos ni de ideología, ni de partidos. Es una obligación como representantes políticos que son de los ciudadanos. Es su responsabilidad. Es descorazonador ver como se tiran los trastos a la cabeza, no acuerdan, no pactan, se insultan, se descalifican,...

Incertidumbre ante el futuro escolar. La crisis nos atañe a todos. Es sanitaria, es social, es económica. Todos en mayor o menor grado estamos afectados. Se reclama y con razón a nuestros representantes políticos que gestionen y que tengan criterio. El desasosiego y la incertidumbre se han instalado en la sociedad. Los padres están desconcertados. Aunque se anuncian protocolos, planes y medidas no terminan de confiar. Los directores de los centros escolares y los profesores se sienten utilizados. No entienden que se les responsabilice de cualquier situación que se produzca en colegios e institutos. Todos están de acuerdo en la presencialidad en las aulas y en el uso de las mascarillas, pero no todos los centros están preparados para responder ante cualquier problema. No puede ser que no se sepa a qué atenerse si hay contagios, si se cierra un aula, un colegio, si hay o no enfermería escolar, dónde comen los niños, si se mezclan niveles de distintas edades, quién se hace las PCR o los test serológicos,…un sinfín de dudas que provocan desconcierto y preocupación. Las distintas propuestas de las autonomías aunque haya un protocolo general tampoco ayudan a aclarar este momento.

El Tablero 

PSOE: Pedro Sánchez y su semana fantástica. Primero ante el IBEX presionando a Casado antes de su encuentro después de no verse desde febrero, luego con el inicio de la ronda con líderes políticos y previamente con Pablo Iglesias con quien ha tenido que limar asperezas una vez más. Por cierto alguien debería explicarle al presidente que lo de la relajación de los ciudadanos con la covid-19 es tan irresponsable como la gestión prácticamente ausente durante el verano del Gobierno. Mientras nos están acostumbrando con demasiada asiduidad  a los eventos de marketing político y a las fotos oportunas y oportunistas. Y aquello del sueño premonitorio con la incomodidad de Iglesias es una realidad. Dicen los propios y crédulos que los PGE se van a aprobar y da igual la geometría variable que se ponga en liza. Suma de moderados y los contrarios. Europa pesa y mucho. A veces da la sensación de que a Sánchez no le interesa que las cuentas públicas salgan adelante. El presidente habla de unidad, está cómodo recordando que el PP no quiere pactar. La propuesta que salga de Moncloa no va a desnaturalizar la coalición y remata no será excluyente y Podemos lo tiene que entender. Cuando tienes que justificarte y explicarte tanto, algo no funciona. ¡Cuánta necesidad hay! 

PP: Pablo Casado recupera la Moncloa. Es broma. Solo han sido un par de horas de encuentro con Sánchez. Ya los gestos posturales en la escalinata de la Moncloa anunciaban que no saldría ningún acercamiento. Lo de la Agencia independiente para el reparto de los fondos de la UE ya se esperaba. Y encima finaliza el encuentro y la portavoz gubernamental, la ministra Montero die que es obstruccionista y frentista. Pues nada, a seguir porque no le queda otra. Sánchez ha priorizado a Inés Arrimadas con la que seguro llega acuerdos. Con Casado serán difíciles los acuerdos incluso para la renovación de las instituciones. Han sido siete meses sin verse, apenas un par de llamadas telefónicas y unos cuantos ataques, descalificaciones y desprecios por acción y omisión, en comparecencias o en redes sociales. nos constitucionales. Insiste Casado “a mí no me presiona nadie más que los españoles y sus intereses” a cuenta de la previa de Sánchez con los empresarios del IBEX. ¿Es un minué, es postureo, ...? lo de rentabilizar el ninguneo, le puede retrtar como el hombre del no por el no. Mientras espera que Cayetana Álvarez de Toledo no se convierta en un callo malayo como un aguijón permanente. Es decir que sea la oposición de la propia oposición.

VOX: Esperando a Santiago Abascal.  Le da igual que Sánchez no le reciba… Dice que habló en pandemia con el presidente en dos ocasiones y le mintió y además le utilizó. Como el pollo Calimero dice que les excluye el Gobierno pero también los demás partidos. Aunque no ha presentado aún la moción de censura asegura que sería para convocar elecciones inmediatas. En dos o tres semanas podría tramitarse la iniciativa parlamentaria con Abascal de candidato. Mientras sigue interpelando a PP y Ciudadanos con la idea de que apoyen su iniciativa. ¡Cuan largo me lo fiais caballero! que dirían nuestros clásicos Tirso de Molina y José Zorrilla.

 UNIDAS PODEMOS: Pablo Iglesias se nos aparece. Un mes sin verle, le echábamos de menos. Ahora con ese moño tan mediático y esos pendientes novedosos como su ausencia temerosa ante las cuitas partidarias metidas en harinas judiciales. No se sabe si lo del moño y las arracadas son un señuelo para el entretenimiento o una nueva estrategia para fijar la atención o desviarla, según se mire. Aunque haya celebrado como si hubiera pisado la luna por primera vez, la rueda de prensa de la ministra de Hacienda Mª Jesús Montero con su secretario de Estado Nacho Álvarez para consensuar los presupuestos, al final se tendrá que achantar ante lo que pide la UE si es que queremos recibir los 140.000 millones que llegarán en 2021.  La petición de subir los impuestos  choca con las negociaciones con Inés Arrimadas por ejemplo.  Pero Iglesias consentirá con Ciudadanos y con el lucero del alba. Así que primero tendrán que pactar entre ellos. Lo del Gobierno de coalición más parece un festival que otra cosa. Y es que su pertinaz encono con su jefe-socio de Gobierno es más de cara a la galería. Sánchez es su refugio y lo sabe.

CIUDADANOS: Inés Arrimadas sin complejos. La líder de Ciudadanos no tiene ningún problema en emparentar con Unidas Podemos o ERC a la hora de consensuar los PGE. Es más se sentará con los de Iglesias si es menester. Dicen que es para minimizar la ideología que Unidas Podemos quiere introducir en las cuentas del Estado.  O sea que serían un a modo de muro de contención de las pretensiones podemitas. En los próximos días ya se preparan encuentros entre los equipos de Ciudadanos y el Gobierno, parece que más con la parte socialista. Asegura Arrimadas que apuesta por unos presupuestos “moderados”. Veremos cómo queda el asunto al final de la película que tiene muchos protagonistas y algún secundario de lujo.

Las frases de la semana

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno: “Es momento de arrimar el hombro. El Gobierno de coalición puede garantizar la estabilidad del Ejecutivo pero no basta, precisa de la máxima unidad” ¡De cuando los números no te dan y haces de funambulista”.

Pablo Casado, presidente del PP: “He venido para arrimar el hombro, y para eso hay que hacerlo sin mirar por encima del hombro, y hay que mirar dónde se apoya el otro hombro. Para salir de la crisis hay que gobernar con decisión” ¡Reclamando posición, pero eres la oposición aunque te hayan robado la tostada como Arrimadas!

Emiliano García Page, presidente de Castilla la Mancha: “El 80% de los casos que nos han llegado vinieron de la bomba radioactiva vírica que se planto en Madrid” ¡Aquello de la solidaridad entre Comunidades Autónomas…!

Óscar Puente, alcalde socialista de Valladolid: “Isabel Díaz Ayuso es un peligro para la Comunidad de Madrid y para las regiones que la rodean. Es una incompetente y de dudoso equilibrio mental” ¡El otrora portavoz del PSOE, dejo de serlo por cosas como estás. La crítica política no es esto!

Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid: “Es probable que prácticamente todos los niños se contagien” ¡Confesión inoportuna. Su responsabilidad es poner los medios para que no ocurra!

Cayetana Álvarez de Toledo, de nuevo verso suelto del PP: “Almeida ha pasado de ser el alcalde de todos los españoles a portavoz contra la ex portavoz. Eso no tiene ni mucho sentido, ni recorrido” ¡La insoportable levedad de la ex portavoz!

José Luis Martínez Almeida, portavoz nacional del PP: “La prueba de que en el PP hay libertad es que Cayetana puede estar dando sus opiniones en los medios” ¡Faltaría más. Duelo al sol!

Fernando Aramburu, autor de la novela Patria que describe quien sufrió y quien hizo sufrir en la violencia etarra, tras publicarse el cartel de la serie de televisión de HBO: “El cartel incumple una norma que me impuse cuando escribí la novela: no perder de vista el dolor de las víctimas del terrorismo, tratarlas con la empatía y el cariño que merecen” ¡La equidistancia oculta la historia real. A las víctimas nunca les reconoceremos suficiente su sufrimiento. Por eso es importante recordar!