VALÈNCIA (EFE). El atleta alicantino Jorge Ureña explicó tras proclamarse subcampeón de Europa en pista cubierta de heptatlón que da más valor a la plata lograda ahora en Polonia que al oro de 2019 en Glasgow y que aunque tiene muchas opciones de ser olímpico vía clasificación, quiere conseguir el billete con la obtención de la mínima, por lo que, si la salud le respeta, está convencido de que irá a Tokio.
El aspecto numérico pasó a un segundo plano para Ureña, quien reconoció que todas las medallas tienen su mérito y que la ultima "es muy gratificante por todo lo que ha ocurrido en el último año, lo que ha sufrido en los últimos meses y las lesiones de los últimos tiempos".
“Ahora, voy a descansar unos días y, de inmediato, a preparar la temporada de aire libre para conseguir la mínima en decatlón que me dé el pase directo a los Juegos de Tokio. La marca exigida de 8.300 puntos es muy dura, lo sé, pero estoy convencido de que la lograré”, afirmó Ureña en declaraciones al Proyecto FER.
Este fin de semana, Ureña acumuló en el Campeonato de Europa de pista cubierta de Torun (Polonia) un total de 6.158 puntos, una marca inferior a las logradas en Belgrado 2017 (6.227), donde fue plata, en el oro de Glasgow 2019 (6.218) y del récord de España (6.249) que ostenta él mismo desde principios de 2017.
El deportista FER no había completado una combinada desde el 1 de marzo de 2020 y explicó que acudía a Polonia envuelto de interrogantes e incluso dudaba de si podría completar las siete pruebas y concluir el heptatlón.
“Por tanto, el resultado ha sido tan gratificante como sorprendente. Estoy muy feliz”, finalizó Ureña, quien tras las tres primeras pruebas (60 metros lisos, salto de longitud y lanzamiento de peso), una gran actuación en el salto de altura le permitió pasar de la séptima a la tercera plaza. Después, mantuvo la inercia en los 60 metros vallas, pértiga y en los mil para hacerse con la plata europea.