VILA-REAL. La Ronda suroeste de Vila-real da por fin los últimos pasos hacia su materialización, 20 años después de que comenzasen las demandas ciudadanas que solicitaban su ejecución. Tras innumerables vericuetos que han retrasado la licitación de las obras (algunos derivados de la crisis económica), la consellera de Obras Públicas, María José Salvador, anunció ayer martes en los mismos terrenos que acogerán las obras, que en los próximos días se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) el concurso para llevar a cabo este vial de circunvalación de la ciudad de la Plana Baixa. Tras el anuncio, el alcalde de la localidad, José Benlloch, destacó que es "una de las infraestructuras más demandadas en nuestra ciudad, que por fin ve la luz después más de 20 años de reivindicaciones".
La planificación de la nueva carretera ha estado repleta de polémica hasta el último momento. De hecho, recientemente el PP de Vila-real ha anunciado una enmienda a los Presupuestos de la Generalitat para incluir 4,1 millones con los que llevar a cabo las obras el próximo año. Desde la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ya habían asegurado que este dinero estaba comprometido, pero que la inexistencia de una partida concreta se debía a un error de nomenclatura que se ha de solucionar.
El montante por el cual saldrán a concurso las obras es de 9,5 millones de euros, señaló ayer Salvador, que mantuvo un encuentro con Benlloch, al que también asistieron el director general de Obras Públicas, Carlos Domingo, y el edil vila-realense de Territorio, Emilio Obiol. Salvador también señaló que, con la licitación, el Consell "da respuesta a una histórica reivindicación de los vecinos de esta localidad y que permitirá mejorar la accesibilidad y vertebración de la ciudad". No en vano, permitirá eliminar el importante tráfico pesado del sector cerámico "de las calles, mejorará la seguridad y disminuirá el ruido y la contaminación".
Y es que actualmente el sector cerámico se reparte en dos ejes industriales situados en el entorno de la N-340 y en la carretera CV-20 de Onda a Vila-real y su conexión se efectúa por la antigua ronda urbana de la población, lo que provoca una mala eficiencia logística y serios problemas ambientales y de seguridad vial. Por ello, el nuevo vial servirá para "mejorar la calidad de vida de los vecinos y aumentar la seguridad y la conectividad para que nuestras empresas sean más competitivas", indicó Salvador.
La ronda suroeste solventará este problema con el nuevo trazado desde la antigua carretera de Viver al Puerto de Burriana. La ronda dispondrá de una calzada de dos carriles con arbolado en los márgenes y un carril bici.
Benlloch quiso destacar que este eje viario es "fundamental para la mejora de la calidad de vida en Vila-real, evitando el tráfico pesado, los ruidos, molestias e inseguridad, pero también para toda la provincia, como una infraestructura estratégica para la conexión de todo el triángulo azulejero". "En 16 años de gobiernos del PP en la Generalitat, el único paso que dieron fue colocar un cartel de una obra que jamás realizaron, en una muestra más de la política de humo a la que nos tenían acostumbrados. Ahora, en tan solo tres años y medio del Consell del Botànic, tenemos ya esta gran noticia. En Vila-real, habrá un antes y un después de la ronda suroeste", agregó el alcalde.
Salvador también hizo referencia al cartel "que colocó el PP, que fue incapaz de poner en funcionamiento esta infraestructura. Nosotros venimos hoy aquí con la resolución firmada para la licitación de la obra, que se ha remitido ya para su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea", señaló la consellera. "La ronda será un eje fundamental para mejorar la competitividad del municipio y la provincia, reducir la contaminación acústica y ambiental. Nosotros no venimos a vender humo sino realidades; a pasar del cartel a la infraestructura", concluyó.
Tras su publicación, el proyecto, que constituye la mayor inversión prevista por la Generalitat valenciana en la provincia en los presupuestos del próximo año, iniciará un periodo de exposición pública de 55 días, previo a la adjudicación y el inicio de los trabajos de ejecución.
