MADRID (EP). El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha propuesto constituir el lunes 24 de febrero la mesa de diálogo pactada con el Govern catalán para empezar a hablar del conflicto político en Cataluña, según ha anunciado Moncloa.
Sánchez asumió el compromiso de constituir este mes de febrero la mesa y participar él mismo en esa primera reunión en la reciente visita que hizo a Barcelona a principios de este mes.
Sin embargo, los días del mes de febrero han ido pasando y no se había fijado aún la fecha, por lo que, según fuentes cercanas a la mesa de diálogo, fue el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, quien instó a la portavoz del Grupo Socialista, Adriana Lastra, a buscar un día para llevar a cabo el encuentro.
Ambos formaron parte de los equipos de trabajo que negociaron tras las elecciones del 10 de noviembre y que se reunieron en multitud de ocasiones con el fin de lograr un acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez, en el que se incluyó precisamente, la constitución de una Mesa bilateral entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña.
Y ahora, ambos han trabajado para fijar la fecha para unos días antes de que acabe el mes de febrero, el plazo que se habían dado Sánchez y Torra para celebrarla. Tras la petición de Rufián de agendar la mesa bilateral, Adriana Lastra le propuso el lunes 24, según las fuentes consultadas.
El día fue elegido atendiendo a los compromisos que tiene el presidente del Gobierno. De hecho, este jueves, Pedro Sánchez tendrá que acudir a Bruselas a negociar el marco financiero plurianual 2021-2027 y no hay previsión de lo que se puede prologar la negociación. El encuentro se presenta duro dado que no hay acuerdo con el último documento presentado por la presidencia del Consejo, Charles Michell, que prevé recortes del 14 por ciento en la PAC y del 12 por ciento en los fondos de cohesión.
La propuesta del 24 de febrero fue bien recibida por ERC y su portavoz aseguraba hoy en los pasillos del Congreso de los Diputados que le parece una "buena noticia" que la mesa se reúna cuanto antes y saluda que se cumpla el acuerdo al que llegaron Sánchez y Torra al principio del mes.
Quien no ha recibido tan bien la propuesta ha sido Junts, cuya portavoz en el Congreso, Laura Borrás, ha acusado al Gobierno de tratar de "imponer" a la Generalitat la fecha de la primera reunión de la mesa de diálogo entre ambos ejecutivos, cree que no se han respetado ni las agendas ni las normas de cortesía. Pero ha prometido hacer "todo lo posible" para acudir a al cita.
El encuentro aún no tiene agenda cerrada --aunque algunas fuentes dan por hecho que en ella se podrá hablar entre otras cosas del relator que plantea Junts per Cataluña--, ni tampoco se sabe los nombres de quiénes formarán parte del mismo, salvo los del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el de la Generalitat, Joaquím Torra; y el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias.
No obstante, fuentes próximas a la mesa consideran que debería haber algún tipo de encuentro previo discreto que prepare la reunión y fije la mecánica de cómo van a ser los siguientes encuentros e incluso la terminología de cómo transmitir a los medios los avances o los desencuentros.
Algo parecido a cómo se desarrollaron las reuniones entre los equipos de trabajo de ERC y del PSOE cuando negociaron el apoyo a la investidura de Sánchez a cambio de abrir una negociación con Cataluña.