VALÈNCIA (EP).El actual presidente de LaLiga, Javier Tebas, ha explicado al magistrado que juzga el presunto amaño del partido Levante-Zaragoza de 2011, cuya victoria sirvió al equipo maño para salvar la categoría, que un jugador que aquel año pertenecía a la disciplina del club aragonés --a quien no ha querido identificar-- le contó que dicho encuentro se había "arreglado" y le pidió que pusiera la denuncia por él porque "tenía mucha carrera por delante" y si lo hacía él mismo "no volvería a jugar a fútbol", ya que sería visto como "un chivato".
Así lo ha expuesto Tebas en su declaración como testigo en la primera jornada de testificales de este proceso, en el que se juzga el presunto amaño del partido disputado en 2011 entre el Real Zaragoza y el Levante UD. Con la victoria en este encuentro, el equipo aragonés logró evitar el descenso de categoría y fue el Deportivo de La Coruña el club que bajó a Segunda División.
Se da la circunstancia de que, durante la fase de cuestiones previas, la Fiscalía Anticorrupción y los representantes legales de LaLiga y el Deportivo de La Coruña coincidieron en su negativa a aceptar la nulidad demandada por el Real Zaragoza y el resto de acusados del macrojuicio, que habían denunciado lo que consideran una "vulneración de derechos fundamentales" que a su juicio se produjo en la denuncia que presentó el actual presidente de LaLiga y que dio origen a esta causa.
La figura del entonces vicepresidente de LaLiga y actual presidente mantuvo un papel protagónico en las primeras jornadas de la vista a raíz de la argumentación del abogado del Zaragoza. Finalmente, el juez anunció que decidirá en la sentencia sobre la petición del club maño de anular el macrojuicio.
Tebas se ha negado en todo momento a identificar qué jugador le contó cómo se llevó a cabo, supuestamente, el amaño de este partido, pero ha negado que haya vulnerado su secreto profesional porque el propio futbolista y cliente de su despacho le pidió que pusiera la denuncia, ha argumentado.
Ha relatado que el Zaragoza estaba en una situación "cercana al concurso de acreedores" y este jugador acudió a su despacho, en Madrid, a "hacer una consulta". "Le vi y comenzamos a hablar y surge este tema. Me dijo que se había enterado de esto (el presunto amaño) y que estaba cansado de esto y tenía mucha presión", ha añadido.
"Yo le dije que denunciara y él me dijo que no volvería a jugar a fútbol, que sería un chivato. Obtuve algunos datos más y denuncié. Él me dijo que denunciara y que guardara su nombre", ha ilustrado sobre cómo fue la conversación que dio origen a este proceso.
"El jugador me dijo que él no la podía poner (la denuncia) porque iba a quedar manchado y que lo hiciera yo. Me convertí en presidente de LaLiga y la conciencia no me permitía conocer estos hechos y no denunciarlos", ha afirmado.
Según ha desarrollado Tebas, el futbolista le dijo "que el partido lo arreglaron y que se hizo con dinero en efectivo". "Me explicó que les hacían transferencias para que lo sacaran, se lo devolvieran al club y se lo dieran a jugadores del Levante", ha relatado el presidente de la máxima competición de fútbol profesional, que también ha señalado que este jugador le trasladó que "las cantidades que habían recibido eran sobre 100.000 euros" e identificó al exfutbolista Javier Paredes, al doctor Jesús Villanueva y el entonces secretario técnico Antonio Prieto como los encargados de hacer llegar el dinero a los jugadores granotas.
Por parte del Levante, el entonces capitán Sergio Ballesteros fue el integrante de la plantilla que se encargó de recibir y repartir el montante recibido por parte del Zaragoza.
Tebas también ha señalado a preguntas del fiscal Anticorrupción Pablo Ponce que el expresidente del Deportivo de La Coruña Augusto César Lendoiro --el club gallego acabó descendiendo como consecuencia de la victoria del Zaragoza ante el Levante-- le llamó y le dijo que el actual entrenador del Valladolid, Sergio González, que pertenecía al Levante en la temporada del partido investigado, le había contado que dicho encuentro "estaba amañado".
Esta llamada se produjo de forma previa al partido. Tebas ha indicado que tras hablar con Lendoiro llamó inmediatamente al presidente del equipo valenciano, Quico Catalán, y este le aseguró que sus jugadores le habían dicho que "no había nada".
Sin embargo, a raíz del relato que posteriormente le hizo el entonces jugador del Zaragoza y de que "había un runrún sobre el partido" acabó presentando la denuncia en el año 2013, en la que se refería a dos partidos más de la temporada siguiente a la del Levante-Zaragoza y sobre los que ha dicho desconocer por qué no se han investigado.
La temporada siguiente, ha continuado, Villarreal y Zaragoza se jugaban el descenso y recibió una llamada del consejero delegado del club castellonense, Fernando Roig Negueroles, que le trasladó que "había que vigilar al Zaragoza" porque Javi Venta, que había jugado en el Levante y militaba entonces en el Villarreal, le había confirmado que "compraron el Levante-Zaragoza".
También ha puesto de relieve que se reunió con el empresario del fútbol Enrique Pina, que le contó que había "un intermediario del Zaragoza para comprar partidos", que le habían encargado que "arreglase los dos o tres últimos partidos de la temporada" y que "tenía grabado cómo se lo encargaban".
Igualmente, se ha referido a los otros dos partidos sobre los que denunció un posible amaño y que afectaban a Getafe y Racing de Santander. En el primero, ha comentado, "había expulsiones muy tempranas, que estaban muy provocadas por el Getafe", mientras que recuerda que en el otro caso "el entrenador del Racing hablaba de que el bajo rendimiento de sus jugadores les había hecho perder".
Si en cualquiera de las dos temporadas se hubiese consumado el descenso del Real Zaragoza, Tebas ha afirmado que el club aragonés habría pasado a situación de liquidación y ni siquiera podría haber iniciado el concurso de acreedores.