Foto: EFE/POOLVALÈNCIA. La segunda jornada del juicio por los presuntos amaños de los contratos de la visita del Papa, pieza valenciana del caso Gürtel, ha comenzado con la resolución de las cuestiones previas planteadas el lunes por las defensas, y los primeros ‘apuntes’ sobre el exconseller Juan Cotino y su papel en la trama. De hecho el empresario Óscar Fragio fue el primero en ponerlo en el disparadero asegurando que era él quien decidía todo.
Respecto de las cuestiones previas, el presidente de la sala, José Antonio Mora dijo que “se rechaza la recusación de un miembro del tribunal porque no concurre causa alguna, no se admite la petición del letrado de Cotino de que se incluya como prueba un análisis sobre el derecho canónico para acreditar que fue el Vaticano quien decidió que la televisión pública valenciana distribuyera la señal de la visita de Benedicto XVI”.
El primero en declarar ha sido Blanco Balín, que ha dicho que reconoce los hechos tal como vienen en el escrito de calificación fiscal. “He reflexionado, he aceptado los hechos que se me imputan y he querido colaborar con 400.000 euros a pesar de tener todo embargado, los he pedido a familiares y amigos”, ha explicado.
El cerebro financiero de la Gürtel contó que conoció a Correa a mediados de 2005 a través de Alejandro Agag, yerno del expresidente del Gobierno José María Aznar. Y respecto a los contratos, declaró que, “se me encarga crear dos sociedades, y como Pérez tenía problemas con Hacienda llevar Orange Market, también me pidieron que llevara la parte económica de esta empresa. El diseño de las sociedades era de Correa y el día a día lo llevaba Pablo Crespo”.
A Pedro García “lo vi una vez en Madrid que nos invitó a comer a Álvaro Pérez y a mí a finales de 2005”. Fue una comida social dijo el imputado. A preguntas de la fiscal dijo que “se comentó que se estaba trabajando en algo de la visita del Papa. La primera vez que voy a valencia es por una compañía llamada Trasgos. Se plantea ir conjuntamente con ellos en lo del Papa, les explico que pueden hacer una UTE. A la reunion fuimos Crespo, Pérez y yo sobre octubre de 2005. Me encargaron los trámites jurídicos y fiscales de la UTE, pero finalmente no se hizo porque me dijeron que iría sola Orange Market”.
Blanco Balín aseguró que “se planteó la solvencia de Orange Market para recibir el contrato. Se planteó que le venía grande el contrato, y me dijo que le iba a ofrecer a Teconsa un beneficio de 200.000 euros por entrar porque se fiaba de Martínez Parra, porque tenían un relación muy anterior porque fueron socios en un fondo de inversión desde 2002 o 2003”.
Tras Blanco Balín fue el turno del empresario Óscar Fragio, que ha sido el primero en nombrar a Cotino, pues ha contado que estuvo en una reunión con él y con Pedro García y otras personas relacionadas con la empresa de sonido en la que trabajaba. Ha asegurado que Álvaro Pérez le dijo: “Éste es el que realmente manda en todo esto”.
De hecho explicó que a partir de estar Cotino en el asunto le dejaron trabajar correctamente. Sobre el contrato de la seguridad ha explicado que las primeras dos noches les robaron dos torres, así que le planteó a Miguel Torroja que necesitaban seguridad 24 horas. Por eso “hablamos con Crespo y nos pasa el teléfono de varias compañías de seguridad de la zona, pero no tenía capacidad. La policía solo podía hacer rondas. Organizamos un sistema rudimentario pero tremendamente eficaz con personas de carga y descarga con chalecos, les dimos un teléfono para que nos avisaran. Eso funcionó”, ha apostillado.
