Pedro Trillo, fundador de Vizologi, en el área coworking de ULab. Foto: APALICANTE. Poner en pie una startup no es fácil, y bien lo saben quienes lo han intentado. Tener una gran idea no siempre significa que vaya a convertirse en un gran negocio, como lo demuestra un índice de mortalidad cercano al 90%. Desterrar los temores y la incertidumbre de los emprendedores es el objetivo de Vizologi, una startup que a su vez aspira a ayudar a otras a encontrar su modelo de negocio. Y para ello recurre a la inteligencia artificial y una base de datos de 1.500 empresas, con los integrantes del Fortune 500 y 1.000 startups norteamericanas y del resto del mundo como materia prima.
El emprendedor, en este caso, se llama Pedro Trillo, y su empresa está ubicada en el espacio coworking del centro ULab, en la plaza de San Cristóbal de Alicante. Pedro, ingeniero de telecomunicaciones, dejó un día su trabajo en un gigante del sector para poner en marcha su proyecto, que él llama 'sociedad unipersonal multinacional' (trabaja con colaboradores en distintos puntos del mundo), con una idea en la cabeza: dar respuesta a la certeza de que la transformación digital va a destruir muchos puestos de trabajo actuales y va a crear otros que aún no conocemos.
"Se me ocurrió poner en marcha un sistema combinatorio de modelos de negocio con probabilidad que generase un modelo para cada ciudadano. El objetivo es que se generen tantos posibles negocios como personas hay". Y dice que, aunque no los ha contabilizado, ya tiene más modelos que emprendedores puedan necesitarlos. "La idea es reducir el riesgo cuando estás en los inicios de una empresa, paliar la incertidumbre. Se trabajan los datos para reducir el miedo del usuario". Los datos salen de empresas de éxito, y ofrecen al usuario "una referencia, para saber cómo entrar en el mercado".
El proyecto ha culminado su primera fase, y los usuarios pueden acceder de forma gratuita a los planes de negocio de 1.500 empresas (en inglés), mientras que para los premium, pagando la suscripción, se accede a los datos. Pedro está buscando ahora un inversor para poner en marcha la segunda fase, la auténticamente revolucionaria: un área de la inteligencia artificial que se llama NLP (Natural Language Processing) y que trata los textos. Esta IA generativa aprenderá de los usuarios, y con una selección de apenas seis tags, generará un modelo de negocio totalmente viable y adaptado a las capacidades, formación y gustos de la persona.
"Ahora es un buen momento para entrar en la empresa", defiende Pedro. Vizologi lleva tres meses en el mercado, cuenta con 30.000 usuarios únicos mensuales y unos 80 recurrentes, y ya ha pasado el umbral de la rentabilidad. Su fundador presentará el proyecto a la próxima convocatoria de ayudas para empresas innovadoras del Ivace, pero no le haría ascos a un inversor privado, si llega. El proyecto, además, tiene vocación global: entran usuarios de 221 países y solo el 3% de los clientes están en España.
Para poner en marcha Vizologi (el nombre alude a negocio, lógica y biología), este ingeniero alicantino abandonó su carrera en las grandes empresas de telecomunicaciones (pasó por Orange y Telefónica como project manager, además de alguna administración pública). "Conocí ULab cuando trabajaba para la Euipo como externo", como parte del equipo informático que luego se deslocalizó a la India, "y pensé que era un buen lugar para emprender. Pero aún no había dado el paso". Luego empezó en casa, y finalmente se instaló en el coworking. "Es muy interesante por los contactos, la gente que conoces... luego Isabel (Romero, project manager del centro) ayuda mucho con la mentorización y el marketing, se celebran eventos... te permite estar al día. La innovación está pasando aquí".
