Vista de la plaza Urban del Grupo San Lorenzo, actualmente en obras. (Fotos: ANTONIO PRADAS)CASTELLÓN. La remodelación del entorno de la plaza Urban del Grupo San Lorenzo ha arrancado este mes de diciembre, después de que el Ayuntamiento de Castellón haya adjudicado el proyecto a la empresa Omega Ingenia por un montante total de 485.319 euros. La actuación, que verá la luz a mediados de 2019, parte de una propuesta vecinal que recibió el mayor número de votos de la ciudadanía en la selección de proyectos con cargo a los presupuestos participativos de 2017. Con esta reforma, el consistorio pretende dignificar un espacio degradado en el que no se ha intervenido desde hace años.
La Asociación de Vecinos del Grupo San Lorenzo de Castellón presentó dos propuestas de mejora del barrio. Por un lado, en la cuadra Saboner, planteó adecuar el frontón y pintarlo, así como acabar las obras del campo de fútbol y vallarlo. "Lleva ya un tiempo descuidado", advertía el colectivo sobre este espacio. Además, proponía transformar el descampado colindante al frontón en una zona de ocio, habilitando un huerto urbano y un espacio de esparcimiento canino.
En cuanto al entorno de la plaza Urban, la asociación vecinal reclamó "poner a San Lorenzo a la altura de lo que queremos para la gente de este barrio". Por ello, proponía una reforma integral que contemplaba pintar la plaza, replantar árboles, reparar escaleras y alumbrado, e instalar una fuente, entre otras actuaciones. "En definitiva, dejar esta plaza como otra cualquier de Castellón", advertían los residentes, que criticaban la falta de mantenimiento y el "abandono" actual de la zona.
Las propuestas fueron las más votadas en el proceso Decidim puesto en marcha por el Ayuntamiento para que la ciudadanía eligiera aquellas actuaciones a las que destinar los presupuestos participativos. El proyecto, con un presupuesto base de licitación de 550.000 euros, se presentó el pasado mes de marzo a los vecinos del Grupo San Lorenzo con algunas modificaciones respecto a la propuesta inicial. El conjunto de la actuación comprende tres espacios diferenciados: la zona verde con pistas deportivas junto a la carretera de Ribesalbes; la plaza Urban; y la zona de las instalaciones deportivas con frontón.
El objetivo, según la memoria del proyecto, es articular las tres zonas "clarificando los usos, favoreciendo la conexión peatonal y resolviendo las deficiencias en cuanto a accesibilidad". Con este fin, se diseña un eje longitudinal que, de oeste a este, se iniciará en la pérgola de la zona verde, cruzará la plaza y conectará con el aparcamiento previsto junto a las instalaciones deportivas. Así, se eliminará la zona de parking de la plaza, que será exclusivamente peatonal, y se dispondrán pasos de cebra elevados en las calles Tinença de Benifassà y Cuadra Saboner.
También se instalará el vallado y la señalización de las pistas deportivas en la zona verde junto a la carretera de Ribesalbes, se rehabilitará la pérgola con una nueva cubierta, se delimitará una zona de esparcimiento canino y se instalarán aparatos de gimnasia para personas mayores, además de mobiliario urbano, árboles, césped y nuevo pavimento.
En la plaza Urban se dispondrán tres plataformas que se destinarán a zonas de estancia y juegos, junto a unos parterres con plantas aromáticas. Y, por último, en el extremo este del ámbito afectado por las obras, se reparará el frontón, se instalará nuevo pavimento y arbolado y, en el descampado contiguo, se creará una zona de aparcamiento.
El proyecto se ha adjudicado a la empresa Omega Ingenia, cuya oferta ha sido la mejor valorada de entre las ocho presentadas y reduce el montante de la obra previsto inicialmente a 485.319 euros. Los trabajos, que cuentan con un plazo de ejecución de seis meses, han arrancado ya. Durante estas últimas semanas se han ido acometiendo las demoliciones previstas y, presumiblemente, la remodelación estará finalizada en torno al próximo mes de mayo, en época de elecciones.
La memoria del proyecto describe el punto de partida de esta zona del Grupo San Lorenzo, un barrio históricamente problemático que busca mejorar las condiciones de vida de los vecinos con propuestas como las que se están materializando a través de los presupuestos participativos.
"En la década de los sesenta, con el acelerado incremento de la población que origina la inmigración desde zonas rurales del interior, empiezan a aparecer distintos núcleos residenciales diseminados por el término municipal, conocidos como 'grupos periféricos', sobre todo en zonas con escaso o nulo valor agrícola", detalla en su redacción el proyecto. Estos núcleos están formados por "la simple alineación de edificaciones destinadas generalmente a vivienda unifamiliar, de baja calidad constructiva y arquitectónica y en su mayor parte autoconstruidas, que vienen a reproducir prácticamente la configuración urbana de los pueblos de procedencia y con total carencia de dotaciones y equipamientos", dice el documento en relación a barrios de la ciudad como el de San Lorenzo, pero támbién como San Agustín o Perpetuo Socorro.
En los años setenta se trata de coser la trama urbana de estos grupos periféricos y se promueve la construcción de pisos de protección pública para "paliar la escasez de viviendas". Es en este contexto en el que la Generalitat desarrolla a principios de los ochenta dos bloques perpendiculares de vivienda pública en el barrio que, junto a las viviendas unifamiliares adosadas, generan un espacio conocido como la plaza Urban. Ya en la década de los noventa, la entonces empresa pública municipal Gumsa urbaniza la Ciudad del Transporte y, con el desarrollo del Plan Parcial San Lorenzo, se crea una zona verde junto a la carretera de Ribesalbes.
Desde entonces, según la memoria elaborada por los servicios municipales, "apenas se han llevado a cabo intervenciones de mejora o de adecuado mantenimiento de los espacios públicos referidos que, por otra parte, han venido siendo objeto de frecuentes comportamientos incívicos, por lo que el estado actual de los mismos es bastante deficiente". El objetivo que se marca el Ayuntamiento con este proyecto es, por tanto, "dotar al espacio público de la dignidad y cualificación urbana que merece", atendiendo a las reivindicaciones vecinales del barrio.
