CASTELLÓ. La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco, denuncia la falta de plazas en centros de día y residencias para personas con discapacidad en la ciudad. De esta manera, se compromete "a explorar todas las vías para buscar solución" a esta falta de recursos para atender a las personas con grave deterioro físico y cognitivo que requieren una asistencia profesional e individualizada en centros especializados. "En estos momentos hay al menos tres jóvenes de 21 años que no pueden continuar en los centros educativos especializados y no tienen más remedio que quedarse en casa", apunta Carrasco.
"Hay que priorizar obras en infraestructuras que sean útiles y que respondan a una demanda real de los castellonenses. Estas residencias y centros de día son las obras que debería priorizar la alcaldesa socialista Amparo Marco y la Generalitat", ha señalado.
Carrasco ha mantenido una reunión con representantes de las asociaciones Frater, Aspropace, Fundación Ateneu y Afanias, especialmente afectadas por la falta de plazas de este tipo, además de llevar seis meses sin cobrar las ayudas de la Consellería. Todas ellas, junto a Fampa Castelló Penyagolosa manifestaron conjuntamente, con motivo del Día Internacional de las personas con discapacidad, la necesidad de abordar sin más demora este problema, ya que en Castellón existe una demanda muy elevada de familias que buscan atender de la mejor manera posible a las personas dependientes.
Por parte de los afectados se ha iniciado una recogida de firmas para que las administraciones públicas atiendan su demanda urgente. "Nos sumamos a la recogida de firmas iniciada por las familias, vamos a coordinarnos con nuestros representantes del Partido Popular en las Cortes Valencianas para que no se pase página. No vamos a permitir que la Conselleria trate a las personas como números de expediente, son personas que necesitan recursos públicos para tener las mejores condiciones de vida. Defendemos la igualdad de derechos y oportunidades de todas las personas", apunta Carrasco.
Otro de los problemas con los que se encuentran "es que no hay coordinación entre las Consellerias de Educación, Sanidad y Bienestar Social. Funcionan como departamentos estancos donde no se cruza la información que sería una herramienta muy útil para hacer una previsión de las necesidades en cuanto a plazas residenciales o en centros de día para ofertar a las familias a medida que lo vayan necesitando. Y tampoco es de recibo que personas con diferentes capacidades se junten en las mismas residencias, como ahora pasa, con recursos no adecuados para ellos porque no hay una especialización concreta. Es algo que debe cambiar”, concluye.