CASTELLÓ. La alcaldable del Partido Popular por Castelló, Begoña Carrasco, ha presentado su plan de gobierno para impulsar el comercio de proximidad y revitalizar el corazón de la ciudad "frente a la falta de políticas de un gobierno municipal de PSOE, Compromís y Podemos que no está haciendo nada ante un centro que languidece".
"Una imagen vale más que mil palabras, el cierre de una tienda emblemática como es Monfort Hogar, en la calle Alloza, da cuenta de la grave situación que atraviesa el centro. Estamos asistiendo no solo a la liquidación de este comercio, sino a la liquidación del centro. Nosotros proponemos reactivarlo con más limpieza e iluminación, quiero recordar que el gobierno se gastó 10 millones de euros en cambiar la luminaria y estamos más a oscuras que nunca. Necesitamos mejor accesibilidad, sin cámaras sancionadoras, con las que el gobierno municipal ya lleva acumuladas más de 65.000 sanciones, y con tiques descuento en parkings, además de campañas ambicionas de bonos comerciales, porque sabemos que funcionan", explica Carrasco.
"Pondremos en marcha una plataforma de venta digital, con un sistema de entrega de productos a domicilio y campañas de promoción todo el año, como la de Navidad, con luces, música y espectáculos para atraer gente de Castellón y de fuera", agrega.
Por su parte, la concejala del Partido Popular y representante en el distrito centro, Susana Fabregat, asegura que las reivindicaciones de las asociaciones vecinales y del comercio son las mismas desde hace cuatro años. "Es urgente contar con un centro vivo, donde los castellonenses vuelvan a estar enamorados de su ciudad”. “Para eso es fundamental que el comercio funcione, que sea un foco de atracción. Para que el comercio funcione hay que llenar las calles y plazas de vida, combinado actividades con la hostelería, fomentando el ocio y la animación, crear en definitiva espacios de diversión para que todo el centro esté en ebullición y atraiga a vecinos y a visitantes".
"Tenemos que recuperar la capitalidad del comercio en el centro"Ç, insiste Carrasco. cada vez más tiendas cierran la persiana. Solo en la calle Alloza contabilizamos hasta 13 establecimientos cerrados con carteles de se vende o se alquila. El centro está sucio, poco iluminado y con poca actividad que hace que hasta las tiendas cierren el sábado por la tarde cuando antes Castelló ejercía su capitalidad, como referente también en el comercio, atrayendo a compradores de toda la provincia. Salvar al comercio pasa por reactivar el centro, llenarlo de vida", añade.
La reforma integral del Mercado Central, con zona de ocio y gastronomía para que el corazón de la ciudad vuelva a latir. Potenciándolo se benefician otros sectores que están íntimamente relacionados. La elaboración de un plan de accesibilidad. Se propone reorganizar el tráfico para que sea más fácil acceder al centro porque hoy muchos no vienen por no saber por dónde han de circular y aparcar sin ser multados por las cámaras del centro. "Proponemos parkings disuasorios y un transporte ecológico y gratuito para acercar a clientes y visitantes hasta el centro. Apostamos por campañas ambiciosas de bonos comerciales, como tienen otras ciudades, para activar el consumo", prosigue Carrasco.
Es un compromiso firme el apagado definitivo del sistema sancionador de cámaras del centro que acumulan 65.000 sanciones y dificultan el acceso a personas con discapacidad y a las empresas de servicios, como fontaneros, empresas de instalación de alarmas, que han de solicitar por anticipado un permiso para acceder sin ser multados.
Un plan de embellecimiento del centro con ayudas para la restauración de fachadas de los edificios para mejorar la imagen de Castelló. Un Plan de limpieza de grafitis y pintadas en las paredes y mobiliario urbano. Establecer un sistema de detección de ADN mediante chip en los excrementos de mascotas en vía pública, para quienes no respeten los espacios acondicionados para los animales.
