Castelló hará controles policiales en el centro para evitar 'barra libre' de coches tras anular las multas

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló incrementará la presencia policial en el centro, al objeto de evitar que la suspensión de las viodeocámaras se convierta en una excusa perfecta para transformar las principales calles del casco antiguo en improvisadas autopistas. El aumento de las patrullas y agentes, mientras dure la cancelación del sistema de control, buscará un doble efecto. Por un lado, de tipo persuasorio, moderando la circulación de automovilistas sin permiso. Por otro, de carácter informativo, explicando a los conductores la moratoria de medio año respecto a la imposición de multas, que incluirá distintas campañas explicativas a fin de eludir los problemas surgidos en estos meses, según informa la Concejalía de Movilidad.

Para esquivar una nueva polémica, el equipo de gobierno realizará buzoneo, reparto de folletos y reuniones con representantes vecinales y de comercios. Además, impelerá otras acciones promocionales para aclarar dudas y garantizar que todo el mundo esté adecuadamente informado sobre el método de fiscalización en el momento que vuelva a activarse a partir del 1 de octubre.

La interrupción del procedimiento de control, que en la práctica simplemente sustituye a los tradicionales bolardos, ha generado gran controversia desde que el consistorio lo pusiera en marcha el 16 de febrero tras un periodo de pruebas de mes y medio. En este tiempo, tanto residentes como transportistas y minoritas se han venido quejando de las videocámaras, denunciando desinformación y arbitrariedad a la hora de establecer los horarios y los itinerarios autorizados. Ese creciente malestar se ha traducido en recogida de firmas, manifestaciones y concentraciones.

Ante ese descontento, y después de comprobar que existe mucha confusión sobre las filmadoras, la Junta de Gobierno Local acordó este jueves cancelar el sistema de acceso a la zona restringida Centro-Núcleo Histórico a través del circuito cerrado de televisión hasta el 1 de octubre. Así lo anunció el portavoz del gobierno municipal, José Luis López, subrayando que la decisión contempla revocar todas las sanciones impuestas. Esto quiere decir que se devolverá el importe de las multas ya abonadas. Asimismo, se anularán los procedimientos iniciados.

Ese reembolso a los afectados todavía no está concretado. El Ayuntamiento baraja distintas opciones, desde retornar el dinero directamente vía cuenta bancaria, hasta habilitar canales específicos para que los ciudadanos puedan presentar sus reclamaciones.  

A pesar de dejar en stand-by el control de acceso al centro, el concejal socialista reitera que "el nuevo sistema es el mejor y más eficaz para contribuir a pacificar el tráfico y reducir las emisiones. Los bolardos retráctiles que limitaban el acceso desde hace más de una década, presentaban déficits en su desarrollo por las dificultades técnicas de su mantenimiento, que provocaban perjuicios a la ciudadanía y limitaciones para cumplir con su objetivo de controlar accesos. Por eso, seguimos apostando por el sistema de cámaras, aunque ampliando el periodo informativo para su implantación", reitera.

Críticas del PP

Para el principal partido de la oposición en el Ayuntamiento, la decisión llega tarde. Según la portavoz del PP, Begoña Carrasco, "la alcaldesa, Amparo Marco, ha tardado dos meses en rectificar pese a que una mayoría de castellonenses se lo estaba pidiendo a gritos. No tiene sentido este sistema con afán recaudatorio y mucho menos en esta pandemia, con una crisis económica sin precedentes que tanto daño está causando a las familias, empresas, pymes y autónomos. No es momento de poner más trabas sino de ayudar a la recuperación económica", asegura.