CASTELLÓ. La Concejalía de Vivienda del Ayuntamiento de Castelló ha iniciado el proceso para rehabilitar dos viviendas municipales. Ambas han quedado en desuso y necesitan una reforma integral de su interior por su mal estado. El departamento de María Jesús Garrido llevará a cabo esta semana un informe de evaluación de los dos pisos que detallará el coste de esta actuación.
La munícipe subraya que, una vez finalicen los trabajos de inspección, se licitará el contrato de ejecución y resalta que ambas servirán para atender a la demanda de vivienda o alquiler social existente en la ciudad. De manera paralela, los técnicos municipales llevarán a cabo la inspección de las viviendas municipales de la zona de Castalia para decidir cuáles necesitan una reforma más urgente. En el caso de este último edificio, el Ayuntamiento tiene presupuestado 350.000 euros para adecentar 60 de las 120 pisos en una actuación que se coordinará con el proyecto de regeneración (ARRU) de la Guinea.
La regidora señala que el consistorio ha asignado este año el uso de siete viviendas sociales, tres de las cuales corresponden al parque municipal que se habían quedado deshabitadas, y otras cuatro a una cesión por parte de la Generalitat Valenciana. Además, la Conselleria de Vivienda ha anunciado la compra de otras cinco viviendas a la Sareb en Castelló que también se destinarán a la demanda social así como la rehabilitación de un edificio de la avenida Capuchinos también para destinarse a este fin.
Garrido afirma que la crisis por la pandemia y la presión con los precios del alquiler "agrava la problemática de la vivienda y obliga a las Administraciones a redoblar esfuerzos para cubrir las necesidades sociales". Reitera que ahora ultima el plan de acción de la nueva estrategia de vivienda con el que pretenden incrementar el parque público, movilizar vivienda vacía de grandes propietarios y activar la bolsa de alquiler social.
