CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló implementará un sistema de medición acústica en tiempo real en el Recinto de Ferias y Mercados cada vez que se celebre un evento con el objetivo de evitar los excesos de ruidos. Este es uno de los compromisos adquiridos por el equipo de gobierno, a través del concejal de Servicios Públicos, Sergio Toledo, después de una reunión mantenido con la junta de la Asociación de Vecinos (AAVV) del Bulevar Blasco Ibáñez.
El encuentro se produjo este martes después del escrito remitido por el colectivo al también teniente de alcalde para mostrarle su preocupación por el aumento de las quejas vecinales a consecuencia de los últimos conciertos y festivales organizados en Refeyme. Unas protestaron que se incrementaron de manera notable a partir de mediados de septiembre, según confirmaron a este diario fuentes del colectivo.
Además de esos controles sonoros, el consistorio requerirá licencias específicas a los organizadores de los distintos espectáculos con vistas a garantizar que se cumplan las medidas relativas a mitigar la contaminación acústica. En este sentido, se buscará que se respeten los límites permitidos por la normativa vigente.
Asimismo, el Ayuntamiento realizará un estudio de impacto sonoro que servirá para fijar las condiciones que deberán cumplir las empresas que opten a la gestión del recinto. Salvo contratiempo inesperado, el nuevo contrato para externalizar la explotación se licitará durante el primer semestre de 2025.
La idea del equipo de gobierno con la instalación del PAU Gumbau pasa por adjudicar una concesión de larga duración. Al menos, de 10 años con opciones de prolongarse hasta los 25. La amplia duración del contrato estará justificada ante la necesidad de que la concesionaria pueda amortizar la inversión que tendrá que realizar a fin de reabrir los aparcamientos subterráneos y mejorar las prestaciones de los equipamientos.
En la actualidad, el consistorio ejecuta obras para solucionar los problemas de goteras, arreglar los baños, cambiar la pintura y disponer de un nuevo alumbrado en el exterior, así como de cuadros eléctricos que garanticen la celebración de la feria. Estas actuaciones tienen un coste de 899.821 euros y deberán concluir antes del 31 de diciembre.