CASTELLÓ. El Ayuntamiento de la capital de la Plana no tendrá problemas para activar a partir del 1 de enero las nuevas ordenanzas fiscales. El bipartito (PP y Vox) rechazará en el pleno de este jueves, 19 de diciembre, las alegaciones presentadas contra la tasa de basuras, lo que se conoce popularmente como basurazo o tasazo. Este lunes, en una comisión plenaria urgente, el ejecutivo local desestimó los cinco recursos formalizados por Compromís, la Federación de Asociaciones Ciudadanas, Consumidores y Usuarios de Castelló (Faccuc), la Asociación de Vecinos y Consumidores de la plaza Donoso Cortés y la Federación Coordinadora de Entidades Ciudadanas de Castelló (Coasveca).
Esas denegaciones se confirmarán en la citada sesión de este jueves, en la que, presumiblemente, el gobierno municipal hará valer su mayoría en la votación (suma 15 de los 27 concejales de la corporación). Los escritos pedían que se declarara nulo el basurazo al considerar, en esencia, que vulnera el espíritu de "quién más residuos genera, más paga".
Los técnicos del área de Impulso Económico, además de apoyarse en distinta legislación para desechar las alegaciones, advierten en su informe que la elaboración de una nueva norma "colisiona con el mandato [...] de que la modificación deba entrar en vigor el 1 de enero". Según los plazos administrativos, esto significa que ha de ser validada y publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) antes del 31 de diciembre, lo que no ocurriría en el caso de redactarse un nuevo precepto.
Al margen de incumplimiento respecto a ese principio de "quién más residuos genera, más paga", Compromís planteaba bonificar con más de un 40% "a la gente que recicla bien la orgánica porque solo este cambio de conducta es el que hará que llegamos a los objetivos que marca la UE", señaló meses atrás su portavoz, Ignasi Garcia.
En cuanto a las demás alegaciones, cabe destacar las argumentaciones de Coasveca, presidida hasta finales de la pasada legislatura por el actual concejal de Participación Ciudadana, Paco Cabañero. Por un lado, proponía la aplicación de la bonificación por reciclar en el ecoparque para 2025. Por otro, que los inquilinos puedan "ir a reciclar para que el recibo que va a nombre del propietario tenga descuento en la tasa". Asimismo, sugerían rebajas para "las personas que soliciten recogida de enseres en su domicilio" y facilitar "más el reciclaje a los mayores".
El obligado tasazo supondrá para los castellonenses pagar entre 166 y 203 euros el próximo año en función del valor catastral de sus viviendas. Los ciudadanos con un inmueble tasado en 63.656,95 euros verán acrecentado el importe en un 80% al pasar de los actuales 92,1 euros a los 165,78 euros. Respecto a las moradas con una valoración de entre 63.656,95 y 79.214,69 euros abonarán 193,42 euros (ahora, 96,71 euros). Por último, el recibo de los pisos estimados en 79.214,69 euros crecerá un 100% al situarse en 202,62 euros (101,31 euros).
Para contrarrestar el basurazo, el Ayuntamiento pondrá en marcha 11 medidas entre rebajas de impuestos (cinco) y bonificaciones (seis). Las más significativas serán el descenso en 2% del IBI, que beneficiará a 144.000 recibos; y la reducción en un 3% del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, que afectará a 119.000 automóviles.