CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló reforzará la seguridad y la presencia de Policía durante la última noche del año en la zona centro y, en concreto, se prestará atención a una de las zonas que se convierten ese día en punto de encuentro de muchos castellonenses: la Puerta del Sol.
Frente a la opción de ver las campanadas desde casa con amigos y familiares desde el centro de Madrid, todavía existe la tradición de ver en directo los últimos doce tañidos del año desde el corazón de la capital de la Plana. De hecho, el edificio del antiguo Banco de Castellón -hoy en día CaixaBank- es desde donde se dan las campanadas.
Si bien en los últimos años parecía que iba perdiendo adeptos esta opción, la pandemia y las semanas de encierro han provocado una 'eclosión' sobre todo entre los más jóvenes para poder disfrutar de salir por la noche. El año pasado, sin embargo, el toque de queda hizo que no hubiera ningún riesgo en las celebraciones pero este año, de nuevo, la gente puede reunirse para celebrar la Nochevieja.
No obstante, el objetivo es que no se produzcan aglomeraciones aprovechando las campanadas en esta plaza. Por eso se incrementará la seguridad de forma que se puedan respetar las medidas impulsadas por las autoridades (Gobierno central y Generalitat Valenciana) con respecto a los protocolos Covid-19.
Sin embargo, sí habrá opciones de celebrar en el ámbito pivado por parte de las empresas privadas. La Generalitat Valenciana ha autorizado la celebración de un cotillón extraordinario con 400 personas en un restaurante de Castelló y, además, habrá cotillones en restaurantes de Benicàssim, Castelló, Torreblanca, la Vall d'Uixò y Vila-real pero que no requieren de un permiso especial al no superar el aforo, según ha informado la Generalitat Valenciana en comunicado.
En el caso de la capital de la Plana, desde la implantación del pasaporte Covid la Policía está reforzando la presencia de agentes por las calles y, además, en Navidad suele ser habitual que haya más presencia de seguridad por el mero hecho de que se concentra un mayor número de personas en el centro para realizar compras, por ejemplo. El ayuntamiento, además, ha puesto en marcha un plan de seguridad que se reúne casi a diario para ir decidiendo qué actos celebrar y si hubiera que suspender alguna fiesta o actividad.
