VALÈNCIA. Los ancianos y trabajadores de las residencias no estarán inmunizados en su totalidad hasta finales de marzo, como mínimo un mes después de las previsiones que tenía en mente el Gobierno valenciano. El desorden en la aplicación del protocolo de vacunación, algunas decisiones adoptadas y circunstancias como el retraso de envíos de Pfizer, han provocado el retraso que afecta al grupo de máxima prioridad.
Así, un cúmulo de factores han conducido a que un porcentaje de residentes y trabajadores de estos centros -en torno a un 10% de unas 50.000 personas- sigan pendientes de la protección total contra el virus que, si nada falla, les llegará entre la segunda semana de marzo y finales de ese mes, aunque alguna podría tener que esperar a abril si se produce algún brote en los centros pendientes. Sobre la hoja de ruta a seguir, este martes mantendrán una reunión la consellera de Sanidad, Ana Barceló, y la vicepresidenta y titular de Políticas Inclusivas, Mónica Oltra.
Tal y como informó Valencia Plaza días atrás, en torno a 6.500 personas de este grupo todavía se encontraban hace una semana pendientes de recibir la primera dosis. Según el presidente de la patronal valenciana de residencias de mayores (Aerte), José María Toro, en torno a un millar de residentes y trabajadores de estos restantes ya habrían sido vacunados, por lo que quedarían por recibir la primera vacuna unas 5.500 personas. El compromiso de la Conselleria de Sanidad, según subrayó Toro, es que a finales de esta semana ya se les haya administrado la primera dosis.