VALÈNCIA (EP). La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha advertido este viernes de que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) supondrá un aumento de costes para el sector agrario, agravará las pérdidas del sector, que en 2023 se situaron en 400 millones de euros, y puede traducirse por ello en un abandono de tierras.
Así lo han señalado el presidente de la organización agraria, Cristobal Aguado, junto a otros representantes de AVA-Asaja, en una rueda de prensa para exponer el balance anual del sector. Un acto que ha coincidido con el acuerdo alcanzado por el Ministerio de Trabajo con CCOO y UGT para subir el SMI para 2024 un 5%, desde los 1.080 euros mensuales por catorce pagas hasta los 1.134 euros. Esta subida se aplicará con efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2024.
Costes más altos
"Los costes de producción son cada vez más altos" y el incremento del SMI "va a repercutir en el campo, como ocurre con todos los aumentos de imputs que hay", ha expuesto Aguado, que considera que si no se pueden repercutir los costes, significará "menos empleo", "más campo que se perderá" y una "disminución de la actividad, si la cadena alimentaria no asume ese aumento de costes".
Los representantes de AVA-Asaja han subrayado que "el SMI, como cualquier aumento de insumos, repercute en los posibles beneficios". "Si el precio no compensa significa pérdidas, las pérdidas significan abandono de tierras, una menor incorporación de jóvenes y desde luego pérdida de capacidad productiva, como estamos teniendo", han añadido.