CASTELLÓ. Baltasar Garzón, jurista y magistrado del Juzgado Central de Instrucción n.º 5 de la Audiencia Nacional desde 1988 hasta 2012, acudió este pasado 27 de octubre al IES Penyagolosa de Castelló para analizar y reflexionar sobre la situación política a nivel nacional y mundial. Durante la conferencia, organizada por la Plataforma per la Justícia i contra la Corrupció y titulada 'El descrédito de las instituciones y el auge de los fundamentalismos', el juez se mostró altamente preocupado por el avance de la extrema derecha a nivel global y personalizó en nombres como Milei, Trump y Netanyahu. 

Garzón, antes de personificar, ensalzó el papel de la justicia como "uno de los elementos, sino el elemento, para que el Estado de Derecho sea tal y para que una democracia responda a las necesidades de la ciudadanía. El derecho, mediante la legalidad, la interpretación de las leyes y su aplicación, aspira a que la vida de los ciudadanos sea mucho más asequible y feliz. La justicia, por lo tanto, tiene mucho que ver con el combate de los fundamentalismos, pues ninguno de ellos ha sido bueno a lo largo de la historia y siempre nos han conducido a un punto de no retorno". 

Precisamente sobre los fundamentalismos mostró su preocupación el magistrado, quien calificó como "un síntoma de lo que estamos viviendo en todo el mundo" la reelección como presidente de Argentina de Javier Milei: "Hoy día estamos asistiendo a un gravísimo retroceso, a veces más perceptible y a veces menos, a un ataque sistemático al modus vivendi, al Estado de Bienestar y a la consolidación de los derechos que ya teníamos adquiridos y que creíamos que no iban a ser tocados y que eran inamovibles".

A raíz de ello, Garzón calificó a Donald Trump como alguien "sin recato alguno, un sicario en contra de la democracia". "Es evidente que ha interferido y no ha respetado la soberanía de Argentina diciendo que, si ganaba Milei, proporcionaba fondos al país para sacarlo de la miseria en la que está. El pueblo es soberano y deberá asumir sus responsabilidades, y hay que tener claro que, normalmente, hay poca gente que da algo a cambio de nada", insistió el magistrado sobre el hecho acontecido en el país sudamericano. 

El juez también se refirió durante la jornada al conflicto existente en Gaza, "del que tienen la llave los fundamentalistas, los ultraortodoxos, los que consideran que el gran Israel bíblico les pertenece. Y al frente, el señor Netanyahu, quien tiene abiertos cuatro procesos por corrupción y quien, cuando pierda el poder o le deje caer la ultraderecha ortodoxa, irá a juicio". 

Y ante el auge del fundamentalismo, ¿qué se puede hacer? Garzón lo tiene claro, pues defendió el deber de cada ciudadano de "no quedarse silente". "Vivimos en sociedad y cada uno de nosotros somos corresponsables de todo lo que sucede. Tenemos que participar de todo lo que nos compete, pues no estamos sentados ante una pantalla viendo una película o serie. Esto nos afecta y, si aparece algo que vulnere tus derechos, al menos podrás decir que no con tu voto o voluntad", enfatizó. 

La jueza de la Dana, "una profesional íntegra"

Antes de finalizar la conferencia y preguntado acerca de su opinión sobre cómo está operando la jueza de la Dana, Garzón aseguró "no tener suficientes elementos de juicio", a la vez que se mostró convencido de que la magistrada de Catarroja es "una profesional íntegra que está actuando de acuerdo a la ley, investigando con independencia, imparcialidad y resistiendo las presiones". 

No solo eso, sino que sobre la actuación política el día de los hechos, el juez aseguró que "se tenían que haber tomado medidas de prevención mucho más drásticas y contundentes que las que se tomaron" para, posteriormente, apuntillar que "cada día vamos averiguando, vamos conociendo unos datos mucho más inquietantes, mucho más masivos para el Estado de Derecho, para la credibilidad del sistema democrático y, por supuesto, para las víctimas".