VINARÒS. El Ayuntamiento de Vinaròs culminará este verano las obras de adecuación del nuevo Centre d'Inspiració Turística Vinaròs-Maestrat, que ocupará la planta baja y las dos alturas del edificio municipal del antiguo Corral de Batet. El espacio, que ya incluye una Oficina de Turismo, aspira a ser la puerta de entrada de todas aquellas personas que visiten la comarca del Baix Maestrat.
La primera fase del proyecto culminó en 2021 y consistió en la rehabilitación del edificio y su ampliación en una planta, que se acondicionó como sala de exposiciones. La inversión de 296.111 euros con cargo a los Fondos Edusi de la Unión Europea fue ejecutada por la empresa Construcciones Rafael Zarzoso.
Hace justo un año se instaló el ascensor así como la red eléctrica, de telecomunicaciones y de climatización. Ahora, el Ayuntamiento ha aprobado la memoria técnica de la reforma de la segunda planta del inmueble. Las obras serán licitadas en breve con un presupuesto de 73.810 euros que permitirán compartimentar esa zona para albergar despachos.
El antiguo Corral de Batet, situado en el paseo marítimo, albergó en la época borbónica el cuartel militar conocido como ‘El Fortín’, que se mantuvo en funcionamiento hasta principios del siglo XIX. Tras ser abandonada la fortaleza se construyó una cochera para guardar carros.
El edificio está dentro del nuevo Plan Especial de Protección del Casco Antiguo, que tramita el consistorio y que desde diciembre de 2022 cuenta con la evaluación ambiental y territorial estratégica favorable. El Centre d'Inspiració Turística Vinaròs-Maestrat, que abrió sus puertas el pasado mes de septiembre a falta de rematar la segunda planta del edificio, pretende aglutinar toda la información que precisen los visitantes, no solo referida a Vinaròs sino también a toda la comarca. Todo ello en un momento muy bueno para el sector, con múltiples iniciativas privadas, sobre todo relacionadas con el turismo rural al aire libre.
Sant Jordi, un municipio en auge
Sant Jordi es uno de los municipios del interior de la comarca en auge, con los olivos milenarios como reclamo. Prueba de ello es que la Generalitat tramita las respectivas Declaraciones de Interés Comunitario (DIC) para abrir dos nuevos alojamientos rurales.
En el primero de ellos, situado en Sant Jordi aunque a caballo con el término municipal de Traiguera, la propietaria compartirá espacio con uno de sus huéspedes. Las otras dos habitaciones estarán en casetas independientes. La parcela, de 10.128 metros cuadrados, dispondrá de piscina y de un corral con varios burros para recrear la vida en el campo. La segunda cada rural en ciernes se emplazará al norte del término municipal, junto al Camí dels Garroferets. Un empresario francés proyecta una vivienda unifamiliar de dos plantas con cinco habitaciones en una parcela de 10.000 metros cuadrados que incluirá dos pérgolas.
Muy cerca, en Càlig, la Generalitat tramita otra DIC para impulsar una casa rural al sur del término municipal, en la partida Las Polas Bajas. La vivienda de nueva construcción se asentará en una parcela de 39.049 metros cuadrados y contará con cuatro habitaciones y una piscina en la zona forestal. Los propietarios del negocio compartirán alojamiento con los huéspedes en una zona privada de la casa.

Plano de la casa rural de Càlig
Más al norte, en Canet lo Roig, la DIC en tramitación permitirá abrir un nuevo alojamiento turístico rural al norte del término municipal. La vivienda, cuya ampliación ya está en fase de ejecución a partir de una antigua construcción que será rehabilitada, se asentará en una parcela de 39.399 metros cuadrados, tendrá capacidad para ocho huéspedes y contará con una piscina comunitaria.
El último proyecto de alojamiento rural previsto en el Baix Maestrat que supervisa el Consell se localizará al oeste de Cervera del Maestre, cerca de la carretera CV-135. Contará con corrales avícolas visitables y una era para trillar y aprender cómo se cosechan los cereales y cómo se recolectan diferentes frutas y verduras. El alojamiento organizará talleres de cocina para enseñar la elaboración de productos tradicionales como quesos, pan, repostería, mermelada o conservas vegetales e incluirá una tienda. Los propietarios del negocio también organizarán rutas guiadas de senderismo, charlas sobre la cultura y la historia de la comarca y enseñarán la actividad del pastoreo y a ordeñar. Los alojamientos estarán diseminados en edificaciones aisladas en diferentes puntos de la parcela, de 11.262 metros cuadrados. La inversión privada rondará los 650.000 euros.
La ampliación de la oferta hotelera avanza más lenta
La ampliación de la oferta hotelera en el Baix Maestrat no avanza al mismo nivel en comparación con el alojamiento rural a pequeña escala, pero también contempla nuevos proyectos. En Peñíscola, el municipio más turístico de la comarca, el Consell tramita otra DIC para abrir un hotel de 4 estrellas con habitaciones diseminadas.
El espacio, de 13.164 metros cuadrados, estará situado en la cara oeste de la AP-7 y se accederá por el Camino de Càlig. Contará con 12 habitaciones de 36 metros cuadrados en construcciones modulares con vegetación autóctona y un restaurante con chill out donde se ofrecerán los cultivos ecológicos obtenidos en el propio recinto hotelero. En el acceso habrá un parking para vehículos y bicicletas.
El negocio, cuya inversión rondará los 154.000 euros, lo gestionará una pareja vinculada al sector hostelero de Peñíscola que vivirá en el propio recinto. Inicialmente proyectaron un glamping pero a finales de 2023 reorientaron la inversión al hotel de cuatro estrellas para optar así a subvenciones públicas.
Por último, el puerto de Peñíscola también está inmerso en un tímido intento de potenciarse como destino lúdico. La empresa Eco Peñíscola tramita una solicitud de concesión demanial para construir y explotar un beach club en la zona de dominio público del Puerto mientras, por su parte, la mercantil Aparthotel González y Simó gestiona ante la Generalitat la prórroga de la concesión que le permite explotar la cantina-bar.