CASTELLÓ (EFE). El festival Arenal Sound arranca esta noche en la playa del Arenal de Burriana para celebrar su 15 aniversario en una edición protagonizada por nombres de la escena del reggeaton, el trap y la electrónica como Steve Aoki, Jhayco, Bad Gyal, Omar Montes o Juan Magán, una edición que comienza con una protesta pro palestina y en la que, a diferencia de ediciones pasadas, todavía quedan abonos a la venta. Otros nombres destacan en el cartel como Rels B, Melendi, Trueno, Dei V, Afrojack, Cano, Ovy on the Drums, Omar Courtz, Juancho Marqués, Despistaos, Malmö 40, Beret, Pole, Chanel, Miranda, Belén Aquilera o Luck Ra, hasta llegar casi al centenar de actuaciones en los escenarios desde el 31 de julio al 3 de agosto.
A esto se suma la fiesta de bienvenida del miércoles que agrupa a diferentes artistas bajo el paraguas de "I love reggaeton". Una edición marcada también por la vinculación de su promotora, The Music Republic, con el fondo de inversión proisraelí, KKR, que ha provocado que se descolgara del cartel la banda valenciana La Fúmiga, pero que no ha tenido mayor impacto en cuanto a cancelaciones de artistas. Una vinculación que sí ha motivado la protesta a las puertas del recinto en la playa del Arenal de Burriana en la jornada del miércoles, convocada por las plataformas Castelló per Palestina y BDS Castelló para mostrar su apoyo al pueblo palestino e instar al festival de Burriana a adherirse "al boicot cultural a Israel".
Zonas de acampada
En cualquier caso, el distrito marítimo de Burriana ya está ocupado por miles de "sounders" que se han instalado en las extensas zonas de acampada habilitadas, todas ellas de pago, en las que es posible dormir en tiendas alquiladas, desde 110 euros, y en glamping, cuyo alquiler oscila entre las 750 y los 1.100 euros. Los efectivos municipales del consistorio trabajan cada año para minimizar el impacto que los miles de jóvenes causan en la localidad a efectos de tráfico, movilidad y residuos y se han habilitado 20.000 plazas de estacionamiento para vehículos en diferentes puntos del municipio con el objetivo de aliviar la presión en los aparcamientos tanto para los visitantes como para los vecinos que reciben a los más de 50.000 "sounders" cada año.
La organización fleta cada año numerosos autobuses desde más de 30 ciudades españolas para tratar de facilitar la movilidad y evitar el colapso, a un precio desde 27 euros. Además, se ha diseñado un dispositivo especial de seguridad que contará con unos 2.500 efectivos coordinados para garantizar el buen transcurrir del evento multitudinario. En cuanto a los asistentes, el recinto tiene una capacidad para recibir a 50.000 jóvenes al día, un aforo que suele completar días antes de su celebración cuando se cuelga el cartel de "no hay entradas". Sin embargo, esta fecha cada vez se demora más y, si hace apenas 6 años se agotaban los abonos en pocas horas después de salir a la venta y sin haber confirmado ningún nombre del cartel, ahora, a las puertas de que empiece a sonar la música, todavía hay disponibles abonos generales y entradas de día.