VILA-REAL. La jornada cuatro de LaLiga es el escenario escogido para que dos de los equipos que mejor se han reforzado en este mercado veraniego se vean las caras en el Metropolitano. A pesar de que el Villarreal atraviesa su mejor momento y firma el mejor arranque de su historia, no hay que olvidar que enfrente está el Atlético, además en su propio estadio. Sin embargo, el cuadro rojiblanco se encuentra en la situación contraria: los datos no son muy esperanzadores, con solo dos de nueve puntos posibles y tres victorias que se escaparon de manera trágica en los últimos minutos.
El Submarino observa con ojos de tiburón hambriento a un Atlético de Madrid que no ha tenido el inicio esperado: perdió ante el Espanyol (1-2), empató con el Elche (1-1) y volvió a firmar tablas contra el Alavés (1-1). Tres triunfos que se le fueron de las manos, ya que en todos los encuentros el equipo del Cholo comenzó por delante en el marcador.

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El Atlético de Madrid no es un rival sencillo para el Villarreal, menos aún en su casa
El Villarreal es un rival muy duro en La Cerámica, pero a domicilio no siempre logra buenos resultados frente a los equipos de la parte alta de la tabla. El historial en el antiguo Calderón y el actual Metropolitano tampoco ofrece las mejores sensaciones a Marcelino: 12 victorias para el Atlético, 7 empates y 5 triunfos para los amarillos.
Lo cierto, eso sí, es que el Submarino siempre ha competido de igual a igual con el club rojiblanco. Si reducimos la mirada a los últimos cinco partidos, el Villarreal ha conseguido una victoria, frente a las dos del Atlético y tres repartos de puntos.
El empate contra el Celta dejó al Submarino tocado, pero no hundido
Es difícil hundir a este Villarreal, que desprende un aura de ganador. El cuadro castellonense tiene gol, tiene defensa y tiene posicionamiento. Aunque el empate dejó a Marcelino con "mal sabor de boca", la realidad es que su equipo ha marcado ocho goles y solo ha encajado uno.
Aun así, el partido terminó en el resultado más justo, 1-1 en Vigo. No fue el mejor partido de esta temporada para el Villarreal, que en la primera parte se encontraba incómodo y, muchas veces, desorientado.
Pero olvidando ese partido tan fastidioso para los de Vila-real, el contexto es el óptimo para un equipo que quiere golpear fuerte a un rival directo en este inicio de temporada.