La línea seguida por Johan Plat tras la destitución de Dick Schreuder no ha sido del todo continuista. El nuevo primer técnico del Castellón ha realizado cambios importantes en el equipo albinegro respecto a su antecesor.
Empezando por los jugadores, el actual número uno del banquillo ha dejado en la suplencia a titulares habituales como Jesús de Miguel y Kenneth Mamah –el nigeriano jugó de inicio en el último partido, pero fue suplente en los cuatro anteriores- para dar un toque diferente a su ataque.
Pero ha sido en los planteamientos donde más se ha notado esta transformación. Los orelluts ya no atacan tan a tumba abierta como hacían con Schreuder y sí se resguardan más atrás, recurriendo incluso a la defensa de cuatro.
Este sistema, que no se vio en tiempos del ya ex técnico, ha sido mucho más que un recurso con Plat, que lo ha empleado en los tres últimos partidos. Como solución de emergencia funcionó ante el Racing de Ferrol cuando los albinegros se quedaron con diez hombres. Después, el técnico lo repitió ante el Eibar desde el inicio y durante una hora en el choque frente al Cádiz a raíz de la lesión de Mamah, cuando entró Borikó.
Incluso con defensa de tres, el Castellón de Plat ha cuidado más esta faceta, reduciendo las llegadas peligrosas de los rivales.
Así, el equipo albinegro ha pasado de recibir 34 goles en 23 partidos dirigidos por Schreuder esta temporada (promedio de 1,48 tantos encajados por encuentro), a conceder tres en cinco jornadas con el actual técnico (0,6 goles por partido).
Tercera mejor racha defensiva en Segunda División
El Castellón ha sido el tercer equipo menos goleado de Segunda División en los cinco partidos de Plat como primer entrenador. Los únicos clubes que han mejorado ese registro han sido el Huesca y el Oviedo, con dos goles encajados cada uno.
Ahora falta por ver si esta racha tiene continuidad, ya que el equipo albinegro sigue teniendo despistes defensivos. De momento mejora cualquier otra dinámica positiva mostrada en defensa esta temporada con Schreuder en igual número de partidos.
Lo que sí queda claro es que los planteamientos del actual técnico ponen un mayor cuidado en la retaguardia y hacen que a los rivales les sea más difícil sorprender en las transiciones.
En el lado menos positivo está el aspecto ofensivo, que se ha visto afectado por este ajuste. Los albinegros ya no llegan con tanta facilidad al área contraria y han anotado cinco goles en otros tantos partidos dirigidos por Plat, por los 32 que convirtió en 23 jornadas con Schreuder.