CASTELLÓ. Como el diseño está para hacernos más felices, o como mínimo para facilitarnos el día a día y proponernos un cambio en nuestras vidas, volvemos a preguntar a la Associació de Dissenyadors i Creatius de Castelló, La Exprimidora, por esas ideas que han tenido durante esta última década y han supuesto, de alguna manera, un "antes y un después" en la provincia, y fuera de ella. Seguramente haya por aquí algún apasionado del queso que todavía no sabe que un estudio de Castellón diseñó un aparato que permite hacer queso fresco en tan solo 15 minutos. Pues así es. Aunque no todos los proyectos que enumerarán a continuación "se comen", no hay ninguno que no esté hecho para cada uno de nosotros. Así de generoso es el diseño.
Tras una primera entrega donde se habló de los cambios más interesantes que se han dado en los últimos diez años. Hablamos con TheLab, Joan Rojeski, Ángela Moya, Ignota y Copiloto sobre más retos y qué les inspira a ellos y ellas para crear.
Un diseño (propio) de estos 10 años a destacar
TheLab: "Nuestro cliente más importante y con más peso a lo largo de los años es REBOLD, una marca internacional dedicada al marketing digital para la que realizamos todo tipo de proyectos, y que nos ha permitido crecer y aprender durante este tiempo gracias a la gran variedad de campañas, canales y medios que manejan. Pero si guardamos un proyecto con especial cariño es la gráfica del último Besing, por lo que significa para nosotros, ya que poder contar en Castelló con un festival de tanta calidad y que aporte tanto en el sector es un privilegio."
Joan Rojeski: "Uno de los proyectos que destacamos de estos últimos 10 años ha sido la ‘Cheese Maker’ que diseñamos para Lékué. Después de la aplicación de una metodología propia, sesiones creativas con el equipo de Lékué y con su feedback continuo, se obtuvo una línea de trabajo vinculada a la comida artesana y tradicional pero elaborada de una manera diferente e innovadora, que respondía a muchos de esos principios y de ahí que el proyecto partiera del concepto del 'Home made'. La Cheesemaker es el resultado de la experimentación sobre el proceso de elaboración del queso y cuyo desarrollo supone la revolución y acercamiento al hogar de un proceso especializado, artesanal y tradicional."
Ángela Moya: "Me quedo con el cartel de Nadal de circ, para la regidoria de Cultura de l’Ajuntament de Castelló. Es el proyecto de imagen gráfica más reciente que he desarrollado y le tengo un cariño especial ya que supuso un gran reto tanto por el tiempo como sobre todo, por la temática. Mi espíritu navideño está algo desaparecido, no es que sea el Grinch... pero digamos que a nivel personal, me cuesta más encontrar y por tanto transmitir, la ilusión que sobrevuela en esta época del año. A pesar de ello, estoy muy contenta con el resultado final y la buenísima acogida que ha tenido."
Copiloto: "La huerta de Valencia está amenaza por el abandono. Necesitamos encontrar modelos de aprovechamiento y conservación de la huerta que refuercen el papel de los agricultores; que ayuden a poner en valor sus productos de KM0., su importancia en la gastronomía y su influencia en la cultura y la historia local. Entre las diferentes actividades que llevamos trabajando en la huerta desde 2019, Miradors de l'horta es del que nos sentimos más orgullosos. Se trata del primer festival de diseño y cultura de l'horta, que reflexiona sobre el desarrollo sostenible y la relación entre los territorios agrícola y urbano. El epicentro del festival es la instalación de una serie de obras efímeras en el corazón de la huerta que sirven de reflexión en sí mismas, y a la vez de contenedor de las diferentes actividades culturales que se desarrollan alrededor del festival."
Ignota: "En Ignota art© le tenemos especial cariño al proyecto de comunicación para consolidar el Centre Municipal de les Arts Rafel Martí Viciana en el municipio de Burriana y alrededores. Un encargo del Ayuntamiento de Burriana para dar a conocer los beneficios de aprender y practicar actividades artísticas. El CMA posee unas instalaciones artísticas únicas en la provincia de Castellón y ofrece la oportunidad de disfrutar del arte a niños y adultos. Un mensaje que proyectamos en un trabajo global de comunicación, que empezamos con el rediseñó de la identidad visual del centro y continuamos con su difusión entre la comunidad social a su alrededor. Además de un nuevo logotipo, señalética, cartelería y web, también editamos vídeos de los diferentes servicios ofrecidos en el centro. Por otro lado, establecimos una estrategia de comunicación online y offline, tanto con sus usuarios como con el público potencial, para reforzar la presencia del CMA en el imaginario colectivo.
Desde el principio, el vínculo del proyecto con el arte nos provocó un flechazo y nos sentimos muy identificados con el proyecto. Los itinerarios artísticos que ofrece el CMA rápidamente nos recordaron a los métodos utilizados por la conocida escuela alemana de diseño, Bauhaus, durante la primera mitad del siglo XX. Y entre todas las acciones que pusimos en marcha una fue especialmente emotiva, buscar a pie de calle el artista que todos llevamos dentro. Un casting urbano para buscar los rostros que protagonizaron la cartelería y que, además, de ser divertido acercó el CMA a la población."
Qué tiene Castellón para la inspiración
TheLab: "La playa, sin duda. Creo que es un referente inspirador para cualquiera que viva aquí. Y hasta hace un tiempo, teníamos establecida la "fideuá de los viernes", que era tradición para salir del ambiente de trabajo y contarnos la vida. Ahora con el covid lo hemos paralizado, pero volverá… Y la fideuá, si es en Terramilles, mucho mejor.."
Joan Rojeski: "Una comida que nos inspira año a año es el almuerzo que celebramos en las fiestas de la Magdalena. Comemos coca de tomata y llonganissetes, creando un vínculo entre el equipo, que ilusiona y motiva."
Ángela Moya: "Aunque la inspiración es caprichosa y aparece en cualquier lugar, es cierto que para mi cualquier punto en el que el mar esté presente, me resulta motivador. Si tuviera que elegir un lugar de la provincia en el que puedo pasarme horas y horas mirando el mar rompiendo contra las rocas o fundiéndose con la arena, sería la Serra d’Irta y su belleza salvaje. Pero tampoco podría pasar por alto la comida. Nuestra gastronomía es espectacular, muy variada y para todo tipo de paladares, ací tenim de tot, desde bares en los que disfrutar de un tradicional ‘esmorzar’ que levanta el ánimo como el de la Herminia (La Pobla Tornesa), pasando por un buen arroz de marisco en el Grau, una coca de tomata de Fernando (La cuina de Fernando) o un menú completo en Atalaya restaurante (Alcossebre). ¡Qué ganas de volver a cualquiera de ellos!"