CASTELLÓ. El programa de turismo social del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), adscrito al Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, continúa perdiendo atractivo entre los empresarios hoteleros de Castellón. En la nueva campaña, que acaba de ponerse en marcha este lunes, solo 11 hoteles de cuatro municipios de la provincia se han adherido al plan estatal. Una cifra similar a la del pasado año pero que ha ido perdiendo fuelle en la última década y que, según el sector, confirma que el programa “no resulta rentable” para los establecimientos.

Los destinos castellonenses que este año forman parte del Imserso son Peñíscola, con seis hoteles; Oropesa del Mar, con tres; Vinaròs, con uno; y en la capital, Castelló de la Plana, se suma un hotel, incluido en el programa de turismo de escapadas. En concreto, los alojamientos participantes son el Hotel Jaime I (Castelló), Peñíscola Plaza Suites, RH Don Carlos, Acualandia, Acuasol, Acuazul y Casablanca (Peñíscola); Magic Fantasy, Magic Games y Magic Sports (Oropesa); y el RH Vinaroz Playa (Vinaròs).

Desde la Asociación Empresarial Hostelera y Turística de la Comunitat Valenciana (Hosbec) advierten de que el programa ha dejado de ser atractivo para muchos empresarios, que “en ocasiones se ven obligados a trabajar a pérdidas”. El delegado de Hosbec en Castellón, Miguel March, explica que, aunque la licitación de este año abría la puerta a introducir mejoras, “no se han abordado los problemas estructurales que arrastra el programa y que ya fueron evidentes en la pasada edición”.

“El Imserso paga entre 25 y 27 euros por habitación, cuando el coste real supera los 34 o 35 euros, de modo que muchos hoteles prefieren cerrar en temporada baja antes que participar”, subraya March. Desde la patronal recuerdan que ya se han trasladado propuestas al Ministerio para revisar los precios y adaptar el modelo a la realidad del sector, pero “las deficiencias persisten y cada vez son menos los establecimientos que se adhieren”. De hecho, en esta convocatoria no se han sumado establecimientos de destinos de sol y playa de referencia en la provincia como Alcossebre, Benicàssim o Benicarló, que sí han participado en otras ediciones del programa de turismo social del Imserso. 

A la escasa rentabilidad del plan del Imserso se suma la posibilidad de negocio para los hoteles que ofrecen otros planes de turismo para mayores como el programa Castellón Sénior, impulsado por la Diputación de Castellón, que está ya en marcha desde este mes de septiembre y que en esta edición ha batido récord de plazas en destinos de la provincia: 12.398 plazas para la temporada 2025/2026, lo que supone un 34,7% más que en la anterior campaña. De hecho, el primero de los destinos del que han podido disfrutar los mayores de 55 años de la provincia ha sido precisamente Alcossebre. 

El objetivo de estos programas es favorecer la desestacionalización del turismo y mantener la actividad hotelera durante los meses de invierno, una función que —según Hosbec— “en el caso del imserso se está perdiendo progresivamente”. La situación resulta especialmente preocupante en Castellón, una provincia con una fuerte dependencia del mercado nacional y una estacionalidad muy marcada, donde este tipo de iniciativas “deberían ser un apoyo clave para mantener el empleo y la actividad en temporada baja”. "En otros puntos de la Comunitat Valenciana, donde hay mayor presencia del turismo extranjero durante los meses de invierno, la estacionalidad es menor pero en la provincia de Castellón resulta especialmente necesario atraer visitantes en temporada baja", remarca el responsable de Hosbec. 

A nivel nacional, el Imserso ha ofertado este año 879.213 plazas, de las cuales unas 150.000 corresponden a hoteles de la Comunitat Valenciana. Pese a que la región sigue siendo uno de los principales destinos del programa, la cifra también ha descendido respecto a ejercicios anteriores, lo que confirma una tendencia a la baja en participación empresarial.